La Consellería de Sanidade ha calificado de “buena” la evolución que presenta la ciudad de Vigo con respecto a la pandemia. El titular de este departamento, Julio García Comesaña, ha incidido en que los datos de contagios se están “estabilizando”, al igual que el conjunto de Galicia, pero ha precisado que el descenso no está siendo tan acusado como en Ourense, Santiago, A Coruña o Lugo. La urbe olívica, al igual que su área sanitaria, arrastra una incidencia acumulada superior a los 300 positivos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días. Sólo Pontevedra, la ciudad que más “preocupa”, se encuentra por encima de esa barrera.
Comesaña reconoció que la progresión es “lenta” pero destacó que se está produciendo de forma “estable”. Según las previsiones de su departamento, la próxima semana se podrán dar “noticias más agradecidas” en el conjunto de Galicia. Esas novedades podrían llegar en forma de fin de restricciones, aunque no se ha concretado si sería en el conjunto de la comunidad o, como todo parece indicar, en determinados territorios. Hay que recordar que las restricciones vigentes en Vigo, Mos, Redondela, O Porriño, Nigrán, Gondomar, Cangas, Tui y Ponteareas expiran el próximo viernes 4 de diciembre a las 15.00 horas.
De cara a esas limitaciones, Comesaña aseguró que Cangas se encuentra “bastante mejor” que hace 20 días, cuando entró en vigor el cierre de la hostelería, y por eso se le separó de Moaña, que ha empezado ahora a sufrir esas restricciones. Por ello, el conselleiro dejó entrever que Cangas –que no tiene movilidad con ningún otro municipio- abandonará las actuales prohibiciones la próxima semana.
Este balance se ha efectuado tras reunirse el subcomité clínico gallego este viernes. Tras ese encuentro se ha decidido relajar medidas en Vedra, O Pino, Mugardos, Viveiro, Toén y San Cibrao. Por el contrario, se ha incorporado al nivel máximo de restricciones a Meis, Meaño, Ribadumia, Cee, Dumbría y Muxía