Vigo estrenó este domingo la nueva normativa elaborada por la Xunta de Galicia sobre el uso obligatorio de la mascarilla con diez propuestas de sanción tramitadas por la Policía Local. Aunque la posición inicial de los agentes municipales pasaba por “advertir” a la ciudadanía, hubo una decena de casos en los que los apercibidos mostraron una actitud hostil.
Según ha informado este lunes Abel Caballero, la nueva regulación “se cumplió muy bien” y la mayoría de las personas no utilizaban la mascarilla por “desconocimiento” y aceptaron ponérsela al pedírselo. Sin embargo, los agentes se encontraron con tres personas que “no fueron receptivas” y reaccionaron “impulsivamente” contra la Policía Local y finalmente fueron denunciadas. Además, una patrulla se topó con un grupo de siete jóvenes que estaban organizando una ‘batalla de gallos’ en la calle sin permisos, sin guardar distancias de seguridad y sin llevar mascarillas. También se rebelaron contra los agentes que les apercibieron y fueron propuestos para sanción ante la Subdelegación del Gobierno, que podría multarles con al menos 100 euros.
Ante esta situación, el alcalde de Vigo ha pedido que se haga caso a la nueva normativa, que él respalda “en su totalidad”. “Es una obligación y hay que cumplirla rigurosa y taxativamente”, ha declarado. Caballero ha ido más allá y ha avisado de que el Concello de Vigo perseguirá todos los incumplimientos que detecte: “Vamos a ser inflexibles con el uso de la mascarilla”, ha advertido.
Según ha alegado, la sociedad debe ser “precavida” y no caer en “ningún tipo de confianza” con el coronavirus. “De no usar la mascarilla se pasa de vivir a no vivir”, ha sentenciado.