Los tres concejales que el BNG tiene en la corporación municipal de Vigo han renunciado a las invitaciones repartidas por el gobierno local entre los miembros de este órgano para acudir a los conciertos de Castrelos. En una decisión similar a la de años pasados, la formación ha criticado que el Concello siga reservando docenas de entradas “de cortesía” para los ediles.
Después de que se agotaran las entradas para la actuación de David Bisbal (la de Calamaro no vendió todo el ‘papel’), el portavoz del BNG en Vigo, Xabier Pérez Igrexas, ha considerado una “indecencia” que los políticos gocen de estas “prebendas” mientras la ciudadanía “tiene que hacer cola al sol y pagar 10 euros por entrada”. Una situación que resulta más “inaceptable” si cabe cuando las localidades disponibles suelen acabarse con rapidez y así se espera que sea de cara a las próximas citas musicales en Castrelos.
El Gobierno de Abel Caballero reparte dos pases a cada uno de los 27 concejales existentes, que se descuentan del número de tiques que luego se ponen a la venta. Además, los diferentes contratos que se firman con las promotoras musicales contemplan otras 50 invitaciones en favor de estas empresas. Todo ello reduce la escasa cifra de reservas disponibles. Recordemos que el aforo de la zona de pago es de solo 5.000 personas.
“Ser cargo institucional no da derecho a este tipo de privilegios de otra época. Nadie acude a un concierto en calidad de concejal/a. La ejemplaridad ética se mide, también, en los detalles”, ha reivindicado Pérez Igrexas.