El último partido de 2014 tuvo un desenlace cruel para el Celta Selmark. Las viguesas volvieron a pecar de falta de experiencia y de oficio y cayeron en la prórroga ante el Arxil. Esta derrota, la tercera consecutiva en casa, hirió el orgullo de las celestes. El parón navideño llegó en un buen momento. Les ha servido para despejar la mente y para afrontar lo que queda de temporada con nueva energía. Este sábado, en Avilés, se comprobará si están del todo recuperadas. Allí les espera el Abda, un rival que marcha por encima en la clasifiación, con una victoria más, pero al que están capacitadas para ganar.
Carlos Colinas cuenta con todas las jugadoras a su disposición para este encuentro, en el que esperan lograr la cuarta victoria de la temporada y acercarse al balance del 50% de triunfos y derrotas (han perdido cinco partidos). Este es el objetivo más cercano que se marca el Celta Selmark, una vez que el inicial, clasificarse para la fase de ascenso, parece hoy un poco lejano.
Las celestes intentarán hacer valer su juventud ante el Abda y propondrán un encuentro con transiciones rápidas ante el previsible baloncesto control que desplegará el conjunto local. Las principales amenazas ofensivas de las avilesinas son la nigeriana Ngwanma Onyeuku y Anna Boleda, sus máximas anotadoras. El Celta Selmark se aferrará al poderío bajo los aros de Minata Keita y a la inspiración de María Pérez Araújo, que estas Navidades cumplió sus compromisos con la selección española.
Tras este encuentro, a las celestes les esperan otros dos duelos teóricamente fáciles, ya que deberán recibir al Universidad de Oviedo, penúltimo clasificado, y visitar al ADB Araski, un rival de la zona media de la tabla. Un pleno de victorias en estos tres partidos les permitiría volver a soñar con acabar la temporada regular entre los cinco primeros.