El Mecalia Atlético Guardés dio un paso de gigante hacia los cuartos de final de la Challenge Cup tras ganar al ACME-Zalgiris Kaunas por 30-23 (14-13, al descanso). Aún así, la renta de siete goles final no refleja la igualdad que por momentos hubo entre los dos conjuntos (17-17, 19-19) hasta que las de Prades dieron un arreón, espantaron sus fantasmas y al segundo intento firmaron un parcial 4-0 que ya resultó insalvable (23-19) para las lituanas.
La defensa 5.1 del principio, las actuaciones de Carratú primero y Ezbida después y la mayor soltura en lanzamiento cimentaron la ilusionante victoria. Mañana, A Sangriña sentenciará. El partido arrancó con el Guardés como un tiro. La defensa 5.1 con África Sempere en el avanzado se mostraba muy intensa y activa y cortaba la conexión primera línea-pivote del Zalgiris con éxito.
Además, cuando las lituanas encontraban hueco con facilidad aparecía Carratú, quien en los primeros minutos sumó media decena de paradas. Poco a poco, con Santiago y Sempere como guías en tareas ofensivas y Campos dirigiendo el Guardés firmó su máxima renta (5-1). El técnico del Zalgiris Kaunas, Antanas Skarbalius, pidió tiempo muerto para cortar la sangría (Min. 7:29), y aunque el Guardés fue capaz de manejar durante unos quince minutos su renta de 3-4 goles, los cambios en el sistema defensivo -del 5.1 se pasó al 6.0- y el fantasma de los errores de lanzamiento volvió a aparecer para meter a las lituanas en el partido.
A Prades ya no le estaba gustando lo que estaba pasando en la pista en el minuto 21:36 con el 11-8. Pidió tiempo muerto, llamó al orden y dio indicaciones a las que contaban con sus primeros minutos: Mazza, Lima, Bravo… La argentina Mazza anotó el 12-8 y a continuación llegó el primer arreón visitante: 0-3 y del 12-8 al 12-11. Aún volvió a marcar Mazza, pero apoyadas en un criterio arbitral bastante cuestionado -pasos, 7m…Las de Antanas Skarbalius firmaron otro parcial de 0-2 para empatar el partido. Un gol de Mazza cerró la primera parte con una ventaja mínima (14-13).
Nunca fueron capaces las lituanas de ponerse por delante en el marcador
Para comenzar el segundo tiempo Prades apostó por dar relevo en portería. Carratú, incapaz de atajar los últimos lanzamientos lituanos, vio cómo Meriem Ezbida entraba en pista para realizar durante la segunda parte muchas paradas de mérito. Aún hubo un 14-14, un 17-17, un 19-19 condicionado por la falta de consistencia en el equipo local.
Nunca fueron capaces las lituanas de ponerse por delante en el marcador a pesar de los esfuerzos en portería de la veterana Olesia Semenchenko y la artillera Audinga Kniubaite (9 goles). Veinte minutos para el final y por fin el Guardés se fortaleció. Lima, Bravo, intento fallido de Sempere, Bravo, parada de Meriem y Buforn recuperaba un balón para colocar de nuevo la renta de 4 en el minuto 46:48. Las lituanas, más jovenes, pero con más altura y contundencia que las locales por momentos, aún apretaron hasta el 23-21.
Gómez sacó petróleo en la línea de 6 metros, Buforn forzó una falta en ataque… y a pesar de las exclusión a Sempere -muy protestada por Prades, quien vio la amarilla- el Guardés siguió a lo suyo viendo cómo el Zalgiris se desesperaba, fallaba y Ezbida paraba para dar alas hasta el 30-23 final.
Mecalia Atl. Guardés (14+16) : Meriem Ezbida, África Sempere (5), Sandra Marqués (6), Martina Mazza (4), Carmen Campos (4), Lorena Pérez (2), Sara Bravo (3), Estefanía Descalzo, Paulina Pérez (2), Patrícia Lima (2), Cristina Barbosa, Rosario Urban, Carla Gómez (2) y Marisol Carratú.
ACME Zalgiris-Kaunas (13+10): Vilte Lubyte (5), Austeja Narauskaite, Neringa Gudaityte, Klaudija Sidlauskyte (3), Rugile Bitinaite, Deimante Baranauskaite, Olesia Semenchenko, Audinga, Kniubaite (9), Karolina Cekuolyte (1), Anastasiya Kalayda, Gabriele Janusauskaite, Greta Burkaite (5).
Árbitros: Lucas Beulakker y Kristof Gilis (Bélgica). Excluyeron por parte de las locales a Sempere (2), Campos y Barbosa y por parte de las visitantes a Lubyte, Cekuolyte y Burkaite.
Incidencias: partido correspondiente a la ida del Last 16 de la Challenge Cup. A Sangriña, 350 espectadores.