El Mecalia Atlético Guardés despidió el 2024 con una victoria en el Derbi As Nosas, un emocionante encuentro que se decidió con un 26-22 a favor de las locales. El pabellón de A Sangriña se vistió de gala para acoger este clásico del balonmano gallego, donde el Guardés demostró su superioridad desde la primera parte, resistiendo la presión de un Porriño que intentó recortar distancias en la segunda mitad. Esta victoria supone la décima de la temporada para las de A Guarda, consolidando su liderato en la Liga Guerreras Iberdrola y reafirmándolas como firmes candidatas al título.
Un inicio prometedor
El partido comenzó con un Guardés dominante, inaugurando el marcador con un gol de siete metros convertido por Pali Fernández, seguido rápidamente por otro tanto en jugada. El primer gol del Porriño no llegó hasta bien entrado el primer parcial, cuando Micaela Casasola encontró un hueco en la defensa local. Sin embargo, la intensidad defensiva de ambos equipos fue la tónica de los primeros minutos, generando imprecisiones y pérdidas de balón que mantuvieron el marcador ajustado (2-1 tras 10 minutos).
Pasado el minuto 11, dos acciones rápidas de Cecilia Cacheda e Itziar Martínez marcaron un punto de inflexión, rompiendo el bloqueo en el marcador. A partir de ahí, el Guardés comenzó a desplegar su juego, logrando una ventaja de cuatro goles (6-3, min. 15). La portera del Porriño, Ana Palomino, y la del Guardés, Míriam Sempere, también tuvieron actuaciones destacadas, evitando que la diferencia en el marcador fuera mayor. A pesar de un intento de reacción del Porriño, el Guardés mantuvo el control y llegó al descanso con una ventaja de 12-9.
La lucha del Porriño y la resistencia del Guardés
La segunda parte comenzó con un Porriño más agresivo, logrando acercarse en el marcador (12-11, min. 36). En este momento crucial, Cecilia Cacheda sufrió una fractura en un dedo de la mano izquierda, pero continuó jugando con valentía durante toda la segunda mitad. El partido se convirtió en un duelo de alta tensión, con el Porriño buscando el empate y el Guardés defendiendo su ventaja con uñas y dientes. A pesar de los esfuerzos del Porriño, el Guardés logró mantener la distancia, gracias en parte a la destacada actuación de Cristina Cifuentes desde los siete metros (6 de 7 goles totales) y al trabajo en equipo de jugadoras como Ceci, Itziar y Jazmín Mendoza.
Victoria y liderato
Finalmente, el Guardés supo gestionar la presión y mantuvo su ventaja hasta el final, cerrando el partido con un 26-22 que desató la euforia en A Sangriña. Esta victoria no solo les da una gran alegría a las jugadoras y a la afición, sino que también refuerza su liderato en la Liga Guerreras Iberdrola, situándose a tres y cuatro puntos de sus principales rivales, Costa del Sol Málaga y Super Amara Bera Bera, respectivamente. Sin embargo, la preocupación se centra ahora en la lesión de Cecilia Cacheda, cuya evolución se seguirá de cerca en los próximos días.