Una vez llegado a categoría sénior, y tras jugar un año en segunda autonómica catalana y tres en categoría nacional, por motivos de estudios me tuve que marchar a Castellón. En el Balonmano Onda contaron conmigo para un proyecto creado para subir a División de Honor ‘B’ y seguidamente a la Asobal. Era una buena oportunidad para acercarme a aquel objetivo que tenía desde niño: jugar a nivel profesional. El sueño duró poco ya que las cosas no fueron como esperaba y volví a Cataluña una vez terminados los estudios.
En casa de nuevo, seguí jugando en Primera Nacional en el Balonmano La Roca, equipo que esta temporada milita en nuestra misma categoría y contra el cual nos enfrentamos este pasado fin de semana.
Al final de temporada, decidí probar suerte donde fuera para poder jugar en División de Honor ‘B’ o en Asobal. Y por fin tuve la oportunidad. Estuve un año jugando en Plata en el Frigoríficos do Morrazo Bm. Cangas. Fue la mejor experiencia deportiva que podría haber tenido. Pero esa temporada el equipo ascendió y decidieron no contar conmigo para la siguiente campaña en Asobal.
Por motivos personales decidí quedarme en Galicia y jugué dos años en Lavadores (1ª Nacional). Al final de esa etapa, no estaba muy motivado por seguir jugando… y hasta finales de julio no tuve claro si seguiría o no…
En ese momento, Cerillo y Jabato se pusieron en contacto conmigo y me explicaron el proyecto de renovación del Academia Octavio y me brindaron la oportunidad de participar y de jugar de nuevo en la Plata, liga en la que no contaba con volver a jugar. Además, me ofrecieron la posibilidad de entrenar a un equipo de la base, uno de los puntos a favor en mi decisión, ya que en otros clubes anteriores también había ejercido de entrenador.
Y aquí estoy… con 28 años, y después de haber jugador 19 temporadas a este deporte en varios equipos y comunidades… y todavía se me eriza la piel después de un buen partido y se me hace un nudo en el estómago antes del comienzo de cada jornada…
Disfruto cada día con un equipo muy joven con muchísima proyección, con ganas de entrenar siempre, competir, disfrutar del balonmano y de la categoría… algo que hace que esté muy cómodo y con ganas de aportar al equipo y al club.
¡Gracias, EQUIPO!»