En el Sánchez Pizjuán comprobaremos si el parón navideño le ha sentado bien a Berizzo y a sus jugadores. Se marcharon de vacaciones cabizbajos, sin frescura y con el alma fatigada. Cuesta saber qué exactamente, pero algo le pasaba a este equipo. El bajón tras la victoria en el Camp Nou traspasa las fronteras de lo inteligible: seis partidos sin ganar, cinco derrotas seguidas y 576 minutos sin marcar gol, récord histórico del Celta. Lo cierto es que Berizzo ha regresado con un discurso similar al que tenía cuando se fue: el culpable no es el juego, la propuesta futbolística es la adecuada.
Para recuperar el gol, la tarea pendiente más acuciante, el Celta ha de lidiar en Sevilla con un grave contratiempo. No estarán allí sus dos máximos goleadores. Nolito cumple ciclo de amarillas y Larrivey se perderá este y los tres próximos partidos porque Agusto (la otra baja, también por acumulación de amarillas) le llamó «ladrón» al colegiado Gil Manzano y este decidió escribir en el acta que el insulto lo había proferido el primer jugador con acento argentino que le vino a la cabeza. Gil, tozudo, tampoco quiso rectificar el acta cuando Augusto confesó. Un grave error que puede traer consecuencias.
Ante estas bajas, el celtismo se encomienda a Orellana, la tercera punta del tridente. Lo más probable es que al chileno lo acompañen en ataque Santi Mina, un jugador en franca progresión, y Charles. El brasileño tiene ganas de reivindicarse, de demostrar que sigue siendo aquel delantero que tantas alegrías dio la pasada temporada. En el centro del campo, se esperan dos habituales, Krohn-Dehli y Radoja. El tercer puesto se la medular se lo jugarán Álex López y ‘Tucu’ Hernández. La defensa también será la teórica titular, con Fontás y Cabral en el eje de la zaga y Hugo Mallo y Planas (o tal vez Jonny) en los laterales. La portería será para Sergio, obviamente. El delantero del filial Borja Iglesias ha sido la gran novedad en la convocatoria. Esperará su oportunidad en el banquillo.
El rival no parece el más adecuado para la reacción. El Sevilla aún no ha perdido en su estadio y es un firme candidato para clasificarse para la Liga de Campeones. Es sexto, pero ha jugado un partido menos al haberse aplazado el encuentro con el que debería haber cerrado el año ante el Real Madrid, al encontrarse el equipo blanco disputando el Mundial de Clubes. Por tanto, los de Unai Emery han tenido más descanso navideño que los vigueses. Aunque esto no debería ser muy relevante al ser el primer partido tras el parón.
Este duelo pasará también a la historia por ser el primero en el que Iago Aspas se enfrente al Celta, el equipo de su corazón. El moañés, como ya le pasó la temporada pasada en el Liverpool, no está teniendo demasiada continuidad. De hecho, no se espera que sea titular. El que sí tiene más opciones de serlo es Denis Suárez. El de Salceda se marchó del Celta siendo un niño. Tras su paso por el Manchester City recaló en el Barcelona y ahora, cedido por el conjunto culé, triunfa en el Nervión y es una de las más firmes promesas del fútbol español.
Al margen de estos dos viejos conocidos, el Sevilla cuenta con un auténtico equipazo que intentará aprovecharse de los errores del Celta. Los de Berizzo deberán demostrar que han recapacitado tras el parón y que vuelven a ser ese equipo que tanta esperanza sembró entre la afición al inicio de la temporada.
ALINEACIONES PROBABLES
Sevilla: Beto; Diogo Figueiras, Pareja, Carriço, Trémoulinas; Mbia, Krychowiak; Reyes, Denis Suárez, Vitolo; y Bacca.
Celta: Sergio Álvarez; Hugo Mallo, Cabral, Fontás, Planas; Radoja, Krohn-Dehli, Alex López; Orellana, Santi Mina y Charles.
Árbitro: Carlos Velasco Carballo (C.Madrileño).