Impecables en defensa y resolutivos en una de las pocas ocasiones que tuvo a lo largo de todo el partido, pero sobre todo serios y entregados a la causa para dar un paso más hacia el objetivo final. El Celta logró este miércoles en San Sebastián una gran victoria para lograr la salvación. Tres puntos basados en la solidez defensiva y el acierto de Aspas desde los once metros.
Hubo rotaciones de entrada para hacer frente a la acumulación de partidos. Sin Okay por ciclo de tarjetas, Bradaric ocupó su lugar para ofrecer un recital defensivo; Araújo y Smolov se quedaron en el banquillo, al que regresó Hugo Mallo recuperado de sus problemas físicos, y Mina tuvo de nuevo opciones desde el primer minuto.
Olvidada la catástrofe del partido ante el Villarreal, la actitud fue de nuevo la del Alavés. Hubo presión e intensidad, pero sobre todo un equipo trabajando en bloque, ofreciendo coberturas a sus compañeros y desplegándose tanto en ataque como en el repliegue tras pérdida de balón.
La Real Sociedad tuvo la mejor ocasión en el primer minuto tras un mal pase de Aspas en la salida de balón. El disparo de Januzaj tuvo la respuesta impecable de Rubén. Los donostiarras intentaron asfixiar al Celta en la creación, pero sufrieron también para generar. Denis Suárez dio su mejor versión desde el inicio y Mina peleó sin descanso con la defensa local.
El premio al esfuerzo llegó justo antes del descanso. Ya habían amenazado los vigueses en dos contras que no llegaron a buen puerto por milímetros, pero a la tercera fue Rafinha el que encontró la clarividencia para sacar el balón a los pies de una nueva cabalgada de Denis. En el área, Aspas persiguió la pelota tras un rebote y el árbitro no dudó ante una obstrucción de Llorente sobre el de Moaña. El delantero no falló desde los once metros y dio alas a su equipo a las puertas de los vestuarios.
En la reanudación Brais Méndez entró por Beltrán. La Real cargó con todo, apretó más en cinco minutos que en toda la primera mitad y el Celta también dio un paso atrás para defender el botín.
Aguantó bien el conjunto vigués en esa situación, sin exponer mucho en ataque al renunciar al balón pero también sin que los locales generasen ocasiones claras. Nolito entró para refrescar las ideas de un Celta que necesitaba aire y que no lo encontraba con un Denis exhausto por el esfuerzo en defensa.
También Bradaric, agotado tras su gran despliegue físico, y Aspas dejaron su sitio a Araújo y Jorge Sáez para reforzar la apuesta defensiva de Óscar García en busca de tres puntos de oro por la salvación. La contribución de todos y cada uno de los jugadores ofreció un panorama extremadamente sólido que desesperó a la Real Sociedad. Ahora toca el Barça, pero con el descenso un poco más lejos.
Real Sociedad: Remiro; Zaldua (min.73, Gorosabel), Llorente, Aritz, Monreal (min.57, Aihen); Zubimendi, Merino, Odegaard (min.57, Portu); Januzaj, Oyarzabal (min.73, Isak) y Willian José.
Celta: Rubén; Kevin, Murillo, Aidoo, Olaza; Bradaric (min.75, Araújo), Beltrán (min.45, Brais Méndez), Rafinha; Denis Suárez (min.70, Nolito), Santi Mina (min.83, Smolov) y Aspas (min.75, Jorge Sáez).
Gol: 0-1, min.45: Aspas, de penalti.
Árbitro: Prieto Iglesias (Comité Navarro). Mostró cartulinas amarillas a Monreal, Aritz, Zubimendi, Rafinha y Smolov.
Incidencias: Partido de la jornada 31 de La Liga disputado en el Estadio Reale Arena.