«Estamos muy felices, por los jugadores, por el equipo. Es mérito de ellos. Han entendido que era una final para nosotros y pensamos en el arco de enfrente. El equipo volvió a dar muestras de jugar como se debe», aseguró.
Eso sí, el Celta tuvo que sufrir en los últimos minutos después del tanto del empate de Trossard. «Ellos empezaron a jugar directos, aunque nos recompusimos con la salida de Facundo (Roncaglia). El 1-1 metió al Genk en el partido. El aplomo y la experiencia del equipo se demuestra en los minutos finales y ganamos la eliminatoria de forma justa», dijo y añadió que «los metemos en el partido con un error individual. De todas maneras, el logro es muy meritorio. Los eliminamos con justicia. Para nosotros se abre un nuevo sueño de seguir avanzando».
Berizzo destacó la fe de sus hombres. «Cada partido que pasa nos hacemos más fuertes o descubrimos de lo que somos capaces. Hemos creído juntos que podemos vencer a cualquiera cuando nos exigimos al máximo», declaró el técnico, que no tiene preferencias en el sorteo de este viernes: «Nos toque quien nos toque son equipos grandes y rivales dificilísmos. Seremos un gran rival para cualquiera».
Por otro lado, dedicó el pase a la afición. «El equipo despierta una ilusión en la gente que me hace recordar épocas pasadas. Que la gente disfrute de un día que vamos recordar mucho tiempo», comentó.
Por último, no desveló si ya ha tomado la decisión de renovar, aunque reconoció que «nada tiene que ver la continuidad con qué competición juguemos».