Apesadumbrado, admitió que «no jugamos el partido como debimos en la segunda parte» y achacó la expulsión de Cabral a los nervios. «Entramos en nervios y expulsión», señaló. A este respecto, insistió en que el error del partido fue el comportamiento del equipo en la segunda mitad, desde el principio. “Íbamos en ventaja pero el mal inicio del segundo tiempo hizo cambiar las cosas», remarcó.
«Hemos perdido dos puntos, después de que se nos hubiera puesto el partido a favor en un primer tiempo aceptable», dijo el técnico del conjunto vigués, que lamentó el mal inicio del segundo tiempo, en el que recibieron el gol, la expulsión y el empate. «Las distracciones de los primeros minutos del segundo tiempo, nos han complicado un partido que, a priori, teníamos en ventaja y que debíamos haber administrado mejor», añadió.
El entrenador del Celta, no obstante, justificó que «no pensábamos que el partido estaba ganado, pero no lo jugamos como debimos en la segunda parte y cuando no juegas con la máxima tensión puede pasar lo que nos pasó hoy: recibir un gol, entrar en nervios, la expulsión e incluso haber estado a punto de perder el partido si el Almería hubiera mantenido los once jugadores en el campo».
Berizzo admitió, en ese sentido, que a raíz de la expulsión de Mauro dos Santos, su equipo volvió «a controlar el partido» y pudo «haber ganado con ese último remate», que se estrelló en el palo en el tiempo de descuento. «Seguimos en la lucha y en la carrera (por el séptimo puesto) y estamos ahí», remarcó el entrenador del Celta, que tras el empate sigue noveno en la liga.