El técnico mantiene la idea de enfrentamientos precedentes pero con dos variaciones o adaptaciones básicas. Una es la paciencia con la posesión y otra, no menos importante, el reajuste del sistema defensivo para neutralizar a un equipo de dos delanteros sin mediapunta. El argentino lo explica al afirmar que «el plan es jugar nuestro futbol, tener el balón y buscar el mejor ataque. Esto no es buscar el primero, es encontrar el mejor. Leyendo bien a un equipo que se repliega bien y que cuando roba lo hace con velocidad y verticalidad. Tenemos que jugar con paciencia, encontrando el pase entre líneas, sin arriesgar y, a partir de ahí, encontrar el pase en profundidad que los obligue a ir cada vez más atrás».
Berizzo da un paso más y explica que el plan de juego del Celta varía más en defensa que en ataque, una parcela que siempre afronta con una misma filosofía. «Con pocos días de preparación podemos plantear un partido. El conocimiento mutuo de la plantilla y mío nos permite adaptarnos rápido. El plan es casi siempre el mismo en ataque, no así en defensa. En función del esquema ofensivo del rival vamos a donde aparezcan. El plan es posesión, verticalidad y recuperación rápida tras pérdida. A este partido hay que añadirle una inteligencia vinculada a la paciencia y a la elección mucho más marcada que en otros», reconoció el entrenador. Adaptaciones en ataque y también en defensa.
Y es que atrás, el Celta ofrecerá alguna novedad ante el Villarreal. Podría entrar Radoja en el equipo como ante el Atlético de Madrid. Para el técnico hay similitudes entre colchoneros y los de Castellón. «Es parecido al Atlético, aunque ellos cambian de esquema. El Villarreal lo conserva y no perdona ningún error. En ese sentido, es muy similar al conjunto rojiblanco con atacantes veloces y rápidos, muy conectados entre sí. Tiene centrocampistas por los costados muy verticales e, incluso, los laterales también lo son», expresó Berrizzo y continuó con un pequeño trabajo de análisis de su rival: «El Villarreal es muy difícil, juega un futbol efectivo, con un esquema muy definido y se conocen mucho. Su filosofía está muy marcada. Tienen futbolistas determinantes, muy peligrosos y rápidos, que nos obligarán a tener mucha vigilancia, incluso cuando tengamos el dominio del esférico. Estoy muy pendiente de su pareja de dos delanteros. El trabajo del centro del campo, en conexión a nuestros dos centrales, será clave».
Y es que Berizzo acostumbraba a realizar un esquema cercano a los tres centales cuando el rival juega con dos delanteros clásicos. Ante el Villarreal pareció descartar esta opción, pero sí reconoció adaptaciones en todo el engranaje defensivo. En definitiva, soluciones tácticas y adaptaciones en ataque y en defensa. Paciencia y trabajo conjunto para intentar parar al cuarto clasificado.