Antonio Mohamed continuó con sus cambios en el Sánchez Pizjuán y esta vez se decidió por una defensa con tres centrales. Arriba, Pione Sisto acompañó a Maxi Gómez y Iago Aspas. Con este esquema, el técnico buscaba músculo atrás y en ataque se encomendaba a la calidad de su tridente.
En la primera parte se volvió a ver un Celta tosco con el balón en los pies, un Celta que abusaba de los balones largos a Maxi en vez de trenzar jugadas con las que superar la presión del Sevilla. En estos primeros 45 minutos se vio un partido trabado y con continuos errores de ambos equipos. Y es que el conjunto local tampoco se estaba mostrando demasiado lúcido.
El Celta no sufría y tuvo un par de buenas ocasiones en los primeros minutos. En el 12, Maxi Gómez rescató un balón largo de Nestor Araujo y de cabeza asistió a Pione Sisto, que se quedó solo ante el meta rival. El danés no acertó en la definición y Vaclík, con una buena mano abajo, despejó su lanzamiento. Cuatro minutos después, Cabral tuvo una gran ocasión tras un lanzamiento de falta. Al central le cayó el balón dentro del área. Se dio la vuelta y disparó a puerta. El esférico se marchó rozando el larguero.
La mejor noticia para el Celta es que apenas sufría en defensa. El ataque del Sevilla estaba tan espeso como el celeste y la zaga de tres centrales estaba respondiendo bien.
Estas buenas sensaciones defensivas se desmoronaron a siete minutos para el descanso. Franco Vázquez condujo una contra en la que Hugo Mallo no quiso hacer falta para frenarlo. El argentino llegó a la frontal y le cedió el balón a Ben Yedder, que se incorporaba por la banda izquierda. Este centró buscando a André Silva, pero el portugués no acertó a rematar. Aunque parecía que el peligro había pasado, la jugada no había terminado todavía. Y es que en la derecha, casi en el banderín de córner, Jesús Navas, sin oposición, rescató el balón y centró al área. Allí estaba Sarabia, que solo en el punto de penalti, cabeceó a gol.
El Sevilla se encontró con un premio excesivo para sus méritos ante un Celta que no reaccionó tras este gol en contra. El partido se fue al descanso con malas sensaciones para los celestes.
Mohamed decidió mover el banquillo y de inicio en la segunda parte salió Dennis Eckert en lugar de Pione Sisto. En estos primeros minutos tras el descanso, el Celta fue a por todas y a los pocos segundos Aspas dispuso de una buena ocasión. Vaclík despejó el disparo del moañés. El Sevilla dio la réplica con un par de acercamientos peligrosos, pero parecía que era el Celta el que actuaba con más ímpetu.
El partido se complicaría definitivamente para los vigueses al quedarse con diez. Araujo vio la primera amarilla en una tangana en el área sevillista y solo dos minutos después, el árbitro le mostró la segunda por una falta a André Silva en la que el mexicano trató de tomarse la justicia por su mano.
Las malas noticias se acumulaban para el Celta porque en el 60 recibió el segundo gol. Fue un tanto que además llegó con intriga. Y es que el árbitro en un primer momento lo había anulado por fuera de juego de Sarabia, que fue el que asistió a Ben Yedder, el autor del gol. El VAR, sin embargo, le dio validez a la jugada y el 2-0 subió al marcador.
Parecía una gesta imposible darle la vuelta al encuentro con un hombre menos. Aun así, Mohamed trató de buscar una reacción y lo hizo de un modo un tanto peculiar, ya que sentó a Iago Aspas para dar entrada en el campo a Boufal. El técnico argentino prescindía de su principal estrella en un momento en el que el Celta necesitaba dos goles.
Boufal, no obstante, fue protagonista, ya que a cinco minutos para el final redujo distancias con un golazo en una jugada que se fabricó él mismo y en la que acabó inventándose un perfecto disparo colocado desde fuera del área. El Sevilla había desperdiciado un par de ocasiones para sentenciar el encuentro y le tocó sufrir un tanto en los últimos minutos. No obstante, el Celta no logró empatar y encajó una nueva derrota.
Sevilla: Vaclík; Navas, Carriço, Kjaer, Sergi Gómez, Arana; Banega (Roque Mesa, min. 91), Sarabia, Vázquez; André Silva y Ben Yedder (Quincy Promes, min. 78).
Celta: Sergio; Hugo Mallo, Néstor Araujo, Cabral, Roncaglia, David Juncà (Júnior Alonso, min. 82); Fran Beltrán, Lobotka; Iago Aspas (Boufal, min. 69), Maxi Gómez y Pione Sisto (Dennis Eckert, min. 46).
Goles: 1-0, min. 38: Sarabia; 2-0, min. 60: Ben Yedder; 2-1, min. 84: Boufal.
Árbitro: Álvarez Izquierdo (colegio catalán). Mostró tarjetas amarillas a los locales Banega, Arana y Carriço; y a los visitantes Roncaglia. Expulsó por doble amarilla a Néstor Araujo en el minuto 58.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la 8ª jornada de Primera División disputado en el estadio Sánchez Pizjuán ante 38.068 espectadores.