Berizzo optó por un once muy parecido al de gala, como ya había avisado en la previa. Rubén tuvo continuidad en portería y Guidetti y Pione Sisto acompañaron a Iago Aspas en ataque. Marcelo Díaz fue el sustituto del lesionado Tucu Hernández en el centro del campo y Fontás suplió en la zaga al sancionado Roncaglia.
La primera parte fue vibrante. El Celta ofreció su mejor versión y el Espanyol hizo gala de una efectividad envidiable, ya que marcó dos goles en sus dos únicas aproximaciones al área.
Los celestes comenzaron el partido presionando arriba y tratando de tocar para encontrar huecos en la tupida defensa catalana. En los primeros minutos no hubo ocasiones, pero a partir del cuarto de hora se desató el vendaval. Primero, Jonny recogió un rechace dentro del área tras un disparo de Aspas que impactó en un rival. El lateral, totalmente solo, envió el balón fuera.
El primer tanto del partido llegó en el minuto 20. Iago Aspas, como había hecho ante el Sporting, marcó de falta directa. Si en El Molinón había colado el balón por debajo de la barrera, esta vez este voló por encima de los jugadores del Espanyol y se coló por toda la escuadra. Todo un golazo.
El Celta se lanzó a por el segundo y tres minutos después, Guidetti vio la amarilla por reclamar un penalti tras caer en el área. En la siguiente jugada llegó la réplica del Espanyol, que se plantó en las proximidades del área. Fontás hizo falta en la frontal que le costó la primera tarjeta. En el lanzamiento posterior, Piatti trató de emular la jugada de Aspas ante el Sporting y envió el balón por debajo de la barrera. Radoja metió el pie a tiempo y el cuero se fue a córner. Pero en el saque posterior, el Espanyol empató el partido. Lanzó Piatti y Gerard Moreno se adelantó a su par y cabeceó a gol.
El Celta no tardó en responder y dos minutos después Wass adelantó de nuevo a los celestes con otro golazo. Al danés le cayó un balón en la frontal del área y con un zapatazo a la escuadra batió a Diego López. Pero la alegría volvió a durar muy poco. Pasada la media hora, Javi López, que había entrado en el campo en lugar del lesionado Javi López, centró desde la derecha, Caicedo cabeceó al segundo palo y allí se encontraba Piatti, que batió a Rubén por bajo.
Era el Celta el que estaba poniendo el juego, pero el Espanyol aguantaba el ritmo a base de efectividad. En el 37, los locales rozaron el 3-2. A Pione Sisto le llegó el esférico en las proximidades del área y se sacó de la manga un tremendo chut que impactó en el palo izquierdo. Poco después, el danés volvió a ser protagonista. Iago Aspas recuperó el balón, se fue de varios contrarios y le envió un pase medido a Pione, que controló de forma deficiente dentro del área y la jugada quedó en nada.
Poco después, se produjo otra acción clave. Fontás se lanzó al suelo para arrebatarle el balón a un contrario, que optó por picar el pase por encima de su cuerpo. El central celeste, en un acto reflejo, estiró el brazo desviando la trayectoria del esférico. Jaime Latre no tuvo piedad y le mostró la segunda amarilla. El Celta se quedaba con uno menos al borde del descanso.
Berizzo hizo un cambio al descanso. Sentó a Guidetti para meter en el terreno de juego a Sergi Gómez, que pasó a ocupar el puesto del expulsado Fontás. Iago Aspas se colocó de delantero centro y Daniel Wass se situó en el extremo derecho.
La segunda parte comenzó sin el ritmo endiablado que había caracterizado a la primera. El Celta, con uno menos, trató de tocar y tener paciencia, pero se mostró mucho más inofensivo. El Espanyol, por su parte, estaba a la expectativa.
Con el paso de los minutos se fue acentuando el dominio del equipo visitante, que sabía que tenía una ocasión de oro para poner tierra de por medio con un rival directo por los puestos europeos. Pero no llegaba al área. El Celta trataba de estirar líneas de vez en cuando, aunque con cierta timidez.
En el 70, Iago Aspas probó los reflejos de Diego López con un potente disparo sin ángulo en el que el meta espanyolista se vio obligado a enviar el balón a córner. Poco después, Balaídos reclamó la segunda amarilla para Hernán Pérez por una falta por detrás. El árbitro hizo la vista gorda.
Berizzo buscó frescura en ataque en el último cuarto de hora. Jozabed entró en el campo en lugar de Pione Sisto. El Celta no pasó apuros en este tramo final e incluso fue él el que tuvo el balón. Los vigueses reclamaron un penalti por mano en el área a cinco minutos para el final y parece que esta existió. Aspas, ya en el descuento, dispuso de una nueva oportunidad.
Finalmente, el Celta sumó un empate en Balaídos que le mantiene en décima posición a 7 puntos del Villarreal, sexto clasificado. La próxima cita de los celestes, el sábado en el Camp Nou ante el Barcelona (20:45).
Celta: Rubén Blanco; Hugo Mallo, Cabral, Fontás, Jonny; Marcelo Díaz, Radoja (Pape, min. 87), Wass; Pione Sisto (Jozabed, min. 77), Iago Aspas y Guidetti (Sergi Gómez, min. 46).
Espanyol: Diego López; Marc Navarro (Javi López, min. 14), Reyes, Óscar Duarte, Aarón Martín; Piatti (José Antonio Reyes, min. 85), David López, Javi Fuego (Jurado, min. 54), Hernán Pérez; Felipe Caicedo y Gerard Moreno.
Goles: 1-0, min. 20: Iago Aspas; 1-1, min. 27: Gerard Moreno; 2-1, min. 29: Wass; 2-2, min. 31: Piatti.
Árbitro: Jaime Latre (colegio aragonés). Mostró tarjetas amarillas a los locales Guidetti y Marcelo Díaz; y a los visitantes Hernán Pérez y Gerard Moreno. Expulsó por doble amarilla a Fontás en el minuto 42 y al segundo entrenador del Celta, Ernesto Marcucci.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la 25ª jornada de Primera División disputado en el estadio de Balaídos ante 11.526 espectadores.