Eduardo Berizzo anunció cambios, pero no se esperaba que fueran tan profundos y que afectaran también al dibujo. El argentino se decidió por una defensa con tres centrales -Costas, Cabral y Sergi Gómez- y dos laterales de largo recorrido que prácticamente ejercieron de extremos: Jonny y Lemos, que se estrenó en partido oficial. La medular fue para Radoja y Tucu Hernández y arriba jugaron Naranjo -otro que debutó-, Pione Sisto y Rossi.
El Celta no entró con buen pie en el partido. A pesar de que Berizzo decidió poblar la zaga, el encuentro comenzó con un garrafal fallo defensivo. En el minuto 2, David Costas envió un pase en horizontal que fue interceptado por Dossevi. El extremo del Standard se marchó con potencia, llegó al área, regateó a Cabral y a Sergi Gómez y batió a Sergio con un disparo cruzado. 1-0 y el Celta aún no había llegado al Maurice Dufrasne.
A los celestes no le sentó nada bien este golpe temprano e inesperado. Era un equipo espeso, temeroso e impreciso. Tuvo que aparecer Rossi para sacar al conjunto vigués del aprieto. El italiano recibió un balón a 25 metros de la portería y ante la pereza de la zaga belga se sacó de la manga un zapatazo que sorprendió al meta Gillet. El balón tocó en el portero y en el palo, pero se acabó introduciendo en la portería.
El tanto sirvió para que el Celta despertase y tras él protagonizó sus mejores minutos de la primera mitad. Radoja y Tucu Hernández comenzaron a hacerse dueños de la medular a pesar de encontrarse en inferioridad numérica y el Standard dio un paso atrás. Pione Sisto se marchaba hacia el centro, dejando una autopista por la banda derecha a Lemos, Rossi se movía con libertad y Naranjo trataba de crear peligro partiendo desde la izquierda.
Los de Berizzo al fin se encontraban cómodos y Rossi pudo marcar el segundo pasada la media hora. Tucu Hernández le envió un buen servicio. El italiano controló dentro del área y acto seguido armó la pierna derecha. Su potente disparo se estrelló en Gillet.
Pero tras esta ocasión, el Celta se vino abajo de nuevo. El Standard dio un paso al frente con la intención de aprovecharse de la debilidad defensiva de su rival. El equipo belga se mostraba más agresivo y la zaga celeste era un caos. Los errores en la salida de balón se sucedían y los locales llevaban peligro en cada una de sus llegadas al área. En el 36, Benito Raman tuvo una buena ocasión tras la enésima pérdida celeste. Su disparo desde la frontal se marchó fuera lamiendo el palo. El Celta era incapaz de reaccionar, ya que a su debilidad defensiva sumaba su inoperancia en ataque. Pione Sisto apenas entraba en juego y Naranjo se mostraba excesivamente errático.
Antes de llegar al descanso, el Standard tuvo una nueva y todavía más clara ocasión. Edmilson centró desde la izquierda y Raman, completamente solo en el segundo palo, envió el balón fuera. El Celta necesitaba con urgencia el descanso para aclarar sus ideas y ordenar su defensa.
Los de Berizzo mejoraron levemente tras el paso por vestuarios, ya que al menos en el inicio de la segunda parte no daba ya la impresión de que el segundo gol del Standard era una cuestión de tiempo. Los célticos trenzaron su mejor jugada del encuentro en el 57. La acción terminó con un disparo de Rossi al palo, aunque el colegiado la había anulado con anterioridad por un justísimo fuera de juego. Con el paso de los minutos, el Celta encontró un arma inesperada: el balón parado. Tucu Hernández rozó el gol en un par de ocasiones. Sus testarazos, sin embargo, se fueron ligeramente altos en ambas.
El encuentro entró en una fase tediosa al ecuador de la segunda parte. Ni uno ni otro equipo parecían capacitados para crear peligro. Berizzo movió en banquillo. Naranjo, tras un debut discreto, le cedió su puesto a Wass. La intención era reforzar el centro del campo, pero la producción de juego del Celta continuó siendo prácticamente nula. El ritmo decayó todavía más, pero al menos los celestes ya no sufrían atrás ante un Standard que parecía que daba por bueno el resultado. El Celta lo intentó, aunque con demasiada timidez, en los minutos finales. El marcador no se movió y los vigueses sumaron un punto en su estreno europeo.
En el otro partido del grupo, el Ajax de Ámsterdam derrotó al Panathinaikos (1-2), por lo que el conjunto holandés se sitúa líder. Los griegos serán el próximo rival de los de Berizzo, ya que visitarán Balaídos el jueves 29 de septiembre. Pero antes el Celta tendrá que volver a la Liga, competición en la que tiene un importante partido ante Osasuna este domingo.
Standard de Lieja: Gillet; Fai, Scholz, Laifis, Echiejile (Fiore, min. 85); Dossevi, Enoh, Trebel, Edmilson; Raman (Mbenza, min. 67) y Belfodil (Orlando Sá, min. 81).
Celta: Sergio; Lemos, Costas, Cabral, Sergi Gómez, Jonny; Radoja, Tucu Hernández; Pione Sisto (Bongonda, min. 81), Rossi (Iago Aspas, min. 85) y Naranjo (Wass, min. 70).
Goles: 1-0, min. 2: Dossevi; 1-1, min. 12: Rossi.
Árbitro: Hüseyin Göçek (Turquía). Mostró tarjetas amarillas al jugador local Belfodil; y a los visitantes Naranjo, Tucu Hernández, Radoja y Bongonda.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la primera jornada del grupo G de Liga Europa disputado en el estadio Maurice Dufrasne de Lieja.