Roberto Barpe, un aficionado del Celta, aseguró este domingo a través de Facebook que el sábado, antes del encuentro ante el Deportivo, le habían requisado una manta en una puerta de acceso a Balaídos. Según este seguidor celeste, la explicación que le dio el miembro de seguridad es que en esta manta estaban dibujadas unas calaveras. Barpe afirma que llevaba la manta para que su hija de siete años se protegiese del frío. En su mensaje en Facebook explicaba lo siguiente: «Onte en Balaídos requisáronme unha manta por levar calaveras. Manta para tapar a unha nena de 7 anos socia do Celta para que poidera ver quentiña o enésimo partido as 22:00 horas. A verdade a nena cometeu un erro gustarlle as «Monster High» pois seica incita a violenza. Vergoña, impotencia…dan gañas de darse de baixa «.
Desde el club achacan este incidente a un error de seguridad y explican que todo se debió a un malentendido, ya que la persona encargada de revisar las pertenencias de los aficionados confundió esta manta con una lona o una pancarta.
Por otro lado, desde el club reiteran que no está prohibida la entrada en Balaídos con prendas que presenten dibujos de calaveras y que este asunto ha sido un hecho puntual generado por un error de apreciación del miembro de seguridad.
Estas explicaciones llegan después de que se crease una agria polémica en las redes sociales. Muchos seguidores del Celta mostraron su indignación con este incidente y señalaron, por otra parte, que miembros de Riazor Blues, la peña radical del Deportivo, portaron una gran pancarta con una calavera en la grada de Río Alto durante el derbi, sin que el personal de seguridad le instase a retirarla.