A los futbolistas, que gozarán de siete semanas de vacaciones, se les ha convocado para el día 9 de julio en la ciudad olívica, de cara al comienzo de la pretemporada. El trabajo más exigente se prolongará hasta el día 26, cuando partan rumbo a Reino Unido, a Ashby de la Zouch, una localidad muy cercana a Leicester. Antes de viajar a tierras británicas, el cuerpo técnico quiere que ya se haya disputado un partido contra algún equipo gallego.
Durante la gira por las islas, se disputarán tres encuentros, que todavía están por cerrar, aunque ya se ha contactado con algunos clubes. El último de esos choques se celebrará el 4 de agosto, para al día siguiente poner rumbo a Vigo y así encarar las últimas dos semanas de pretemporada.
Con el equipo de regreso, la intención es cerrar “uno o dos” amistosos más, en función de lo que determine el equipo liderado por Juan Carlos Unzué. Uno de ellos podría ser el correspondiente al Trofeo Quinocho. No obstante, Miñambres ha matizado que la disputa de este torneo durante el verano no está garantizada, ya que a partir del 11 de agosto hay muchas ligas europeas que ya han iniciado la competición. De hecho, ha deslizado la posibilidad de que lleve a cabo antes de viajar a Inglaterra, “aunque sería muy pronto”, o aprovechando nuevamente algún parón liguero.
Así, el Celta 2017-18 afrontará menos partidos de preparación de los habituales, ya que “el cuerpo técnico no quiere tantos amistosos” como en años precedentes.