«Es un parón esperando la llegada del director deportivo nuevo. Tenemos muy claro los lugares donde hay que reforzarnos o iniciar búsqueda y eso necesita de la presencia del director deportivo. No es preocupante. Hay mucho tiempo. No he hablado con el nuevo. Desconozco quién es, así que difícilmente puedo hablar con él», señaló el técnico.
En su despedida, Torrecilla aseguró que dejaba el Celta con los deberes hechos. La dirección deportiva que él encabezaba tiene en su lista a 1.400 jugadores susceptibles de ser contratados. Ahora, su sustituto deberá hacer la criba definitiva y deberá trabajar codo con codo con Berizzo para armar un equipo competitivo que pueda afrontar con garantías el reto europeo de la próxima campaña. El técnico cree que hay tiempo por delante para planificar el próximo curso.
«El mercado a veces arranca más tarde. Creo que ahora es tiempo de terminar muy bien. Esa atención puesta en lo que viene puede esperar un tiempo hacia delante. Queremos terminar muy bien una Liga que ha sido para nosotros de mucho aprendizaje, de mucha intensidad, de muchas emociones, con Copa del Rey dentro. Valoramos como equipo haber sostenido una gran regularidad en relación a la primera, donde sufrimos aquel bache. Todos hemos crecido: yo como entrenador, el equipo como equipo y los jugadores a nivel individual. El desafío es seguir haciéndolo y sosteniéndolo en el tiempo en dos jornadas más. Debemos sentirnos íntimamente satisfechos o con la sensación del deber cumplido y que estos dos partidos nos terminen de cerrar una gran temporada», comentó el técnico.
Uno de los nombres que ha sonado con más fuerza para sustituir a Miguel Torrecilla es el de Felipe Miñambres, actual director deportivo del Rayo Vallecano. Berizzo reconoce que no lo conoce en esta faceta. «Lo he enfrentado. Conozco su labor desde fuera en su actual equipo, pero no lo conozco en funciones de director deportivo», finalizó.