Marcos Serrano, que estuvo presente como corredor en los primeros pasos del proyecto Xacobeo (Karpin Galicia, en aquella época), se estrena a los mandos de un equipo élite y sub-23. Describe lo ambicioso del proyecto: «Después de dos años de rodaje, esta temporada vamos a dar un salto de calidad. Hemos conseguido corredores importantes y los jóvenes con los que ya contábamos tienen un añito más, están más rodados».
Serrano es prudente, pero no esconde que la intención del club es crear en un futuro una estructura profesional con el Xacobeo como modelo a seguir: «Esa es la idea de nuestro presidente, José Luis Chamarro. Desde el que lleva alevines al que lleva élite siempre estamos buscando patrocinadores. Cada uno mira para arriba y nos gustaría crear un proyecto profesional. En su día, se dieron unas circunstancias increíbles para que saliera el Xacobeo y durante cuatro años fue una gran cantera para el ciclismo gallego».
Aunque la base es sólida, queda mucho trabajo por hacer. El paso fundamental, sin duda, es conseguir un patrocinador potente dispuesto a apostar con fuerza: «Se tiene que dar con la tecla adecuada. Nunca sabes por dónde pueden salir las circunstancias. En Galicia estamos trabajando para ello, no sólo José Luis (Chamorro), también otros clubes y gente como Jesús Blanco Villar. La categoría Continental, tal y como está ahora el ciclismo, le vendría muy bien a lo que en su día fue el Xacobeo. Es el escalón superior para formar corredores antes de que pasen a grandes estructuras. Si no tienen la salida de un equipo bueno para dejarse ver, es muy difícil».
Aser Estévez, el primer puntal
Para poder aspirar al profesionalismo, primero hay que lograr resultados en el campo amateur. Para ello, el Club Ciclista Rías Baixas se ha reforzado de cara a la temporada 2015. El principal fichaje ha sido el del corredor de A Guarda Aser Estévez. A sus 26 años, tiene un curriculum envidiable, que incluye tres títulos autonómicos, uno de campeón de España contrarreloj en categoría sub-23, una participación en un Mundial y victorias en carreras importantes. Serrano cree que es un refuerzo de lujo: «Va a ser nuestro jefe de filas. Tiene experiencia y palmarés. Será un gran jefe de filas y un gran maestro para los jóvenes. Está en una edad en la que tiene que intentar dar el salto a profesionales. A nosotros nos viene muy bien, porque hoy en día, que parece que la tecnología aplicada al ciclismo va hacia atrás, una vez que empieza la carrera necesitas un líder, una persona que sepa llevar a los corredores».
A su alrededor, habrá un plantel en el que se combina veteranía y juventud. El objetivo es congregar al mayor número de corredores gallegos de nivel. Entre las jóvenes promesas, Serrano apunta algunos nombres: «Llevamos dos o tres años con campeones y subcampeones gallegos. Estamos fichando a gente contrastada que viene de las escuelas. Cristian Mota, David Pérez, Xoel Días o Iván Roade… Gente que en categorías inferiores ha demostrado que está al mejor nivel de España. Este conjunto, si somos capaz de calibrarlo, nos va a dar alegrías».
Serrano espera que con este proyecto ambicioso puedan capear una crisis que ha acabado con prácticamente todos los equipos del pelotón nacional, pero que no ha podido con la afición ni con la ilusión de los chavales que están empezando. «Donde ha tocado fuerte es en España, porque el ProTour está más fuerte que nunca. Cantera hay, solo hace falta ir a las escuelas. Y espectadores veo más ahora que antes, al igual que cicloturistas. Sales a rodar y ves un montón de ciclistas», explica el redondelano, que afronta este desafío con bagaje a sus espaldas: «Mi rodaje ya lo he tenido. Llevo cuatro años con la escuela. Ahora es otra categoría, sí. Pero esto es cíclico. Estamos llegando una nueva hornada de entrenadores».
La Copa de España y el calendario gallego esperan al Club Ciclista Rías Baixas, que iniciará su temporada el mes de febrero en Extremadura con la ambición como seña de identidad y el ejemplo del Xacobeo Galicia como horizonte al que llegar en un futuro.