Salinas, principal referente ofensivo del Coruxo, lleva semanas arrastrando una pubalgia y el equipo ha notado su ausencia. El último gol verde lo marcó Mateo seis jornadas atrás, en el primer minuto del duelo ante el Logroñés, en el que el conjunto vigués logró su última victoria. Desde entonces, dos empates y tres derrotas que lo han alejado de los primeros puestos. Rafa Sáez espera que este domingo comience a investirse la tendencia: «El partido debe suponer un punto de inflexión, ya que es el primero de la segunda vuelta de la liga. Nuestro objetivo es mejorar, sobre todo en cuanto a los resultados».
Es obvio que el Coruxo necesita gol y de ahí el fichaje de Rubén Rivera. El delantero coruñés, que llega procedente del Avilés, ha entrado en su primera convocatoria tras apenas una semana entrenando con sus nuevos compañeros. Es probable que tenga minutos y tampoco está descartado que sea titular dada la plaga de ausencias. Rivera quiere recuperar sensaciones, volver a ser el jugador que deslumbró en el Montañeros hace unas temporadas. Ante estos problemas de cara a la portería rival, Sáez explica que «es cierto que estamos atascados ante el gol, pero trabajamos para solucionarlo cuanto antes».
Por otro lado, el Coruxo no se fia de un colista que llega al partido tras perder ante el Celta B en Barreiro. Cree que la necesidad del Marino lo hace más peligroso y no quiere que sus hombres se confíen lo más mínimo: «El rival se juega mucho, ya que está en una posición muy delicada. El encuentro nos va a exigir una gran concentración y atención. Cualquier despiste lo podemos pagar caro».