El técnico vigués había analizado a sus rivales al conocer los emparejamientos por el ascenso, por lo que en todo momento supo del planteamiento canario. «Son muy previsibles, todo lo que vi de sus partidos, de los resúmenes, lo hicieron en la ida. Nosotros empezamos el partido muy bien, con el dominio de la pelota y con tres o cuatro ocasiones claras que no supimos materializar. Ellas juegan muy replegadas y cuando roban salen a la contra con las tres de arriba, que son muy buenas. En la segunda parte el calor también nos afectó, aunque conseguimos el gol que nos mete en la eliminatoria», dijo Ferreiro.
El factor campo tiene que ser determinante para lograr dar la vuelta a la eliminatoria. «Necesitamos que la gente apriete mucho, que vengan los aficionados a apoyarnos. En la ida nos faltó acierto, me espero el mismo planteamiento del Femarguín, por lo que tendremos que creer en nuestro juego. Ellas fueron muy efectivas y nosotras no, eso desniveló el encuentro», reconoció el entrenador vigués.
De pasar de ronda, el Olivo se enfrentaría al ganador de la eliminatoria entre Madrid Club de Fútbol Femenino y el Oiartzun vasco. Tras la disputa del partido de ida, la eliminatoria tomó ventaja para las madrileñas, que vencieron 4-2. Sobre los dos equipos, Ferreiro dijo no tener ninguna preferencia ahora mismo.
«Me importa primero el partido del domingo, después, si ganamos, ya veremos contra quién jugamos», aunque también añadió algo sobre estos dos equipos. «Tengo bastantes referencias sobre los dos. El Madrid tiene muchísima calidad, con la pelota son muy buenas pero además saben jugar al contraataque. Paloma y Mellado marcan la diferencia en ese equipo. Por su parte, las vascas son muy buenas en el juego directo, tienen a Esti Bajo, que es la mejor goleadora de la categoría, son muy buenas también, así que no tengo preferencias», finalizó David Ferreiro.