Este triunfo ayuda a cerrar definitivamente una crisis que ya empezó a ser menos crisis hace tres jornadas, cuando el Coruxo rompió una sequía goleadora de más de 600 minutos ante el Sporting B. «Más que por el hecho de no ganar, estábamos preocupados por no marcar», dice Sáez, que admite que el fichaje del delantero Rubén Rivera en el mercado invernal les ha venido muy bien: «Cada futbolista tiene su especialidad y la ausencia por lesión de Salinas nos paralizó. Rubén ha llegado para reforzar la plantilla y lo está haciendo bien».
Sáez destaca que la victoria lograda el domingo se produjo ante un rival de entidad, lo que le da más valor. «El Avilés es muy buen equipo. En la primera parte nos hizo daño en las jugadas a balón parado y tuvimos que sacar dos balones en la línea de gol. Además, defensivamente es muy impermeable. En la segunda parte dimos un paso al frente y el primer gol llegó gracias a un tiro desd la frontal», explica.
Tras este triunfo, el Coruxo se sitúa prácticamente en tierra de nadie. Está 10 puntos por encima del descenso directo -y 7 por encima de la promoción- y a 9 del cuarto clasificado. Con 15 jornadas por jugarse todavía, no está muy claro cuál ha de ser el objetivo del conjunto vigués en lo que resta de temporada. A Rafa Sáez no le preocupa, el técnico pontevedrés es fiel a la filosofía de «partido a partido» y los tres puntos sumados ante el Avilés no provocan que se fije en la tabla y en la distancia con los primeros clasificados. «Nosotros no vamos a cambiar para nada nuestra manera de proceder. El proceso sigue siendo el mismo. Esta semana solo pensamos en el partido del domingo contra el Langreo».