Tras el parón obligado por la pandemia, la carrera Vigo Contra el Cáncer está de vuelta. El próximo 16 de octubre, la asociación espera volver a conquistar las calles de Coia con el apoyo de la ciudad. Será la novena edición de una carrera que, desde 2013, acumula más de 170.000 euros donados a la investigación contra el cáncer.
El diseño del cartel de este año, al igual que en ocasiones anteriores, ha corrido a cargo de César Otero. Una vez más, el diseñador ha vuelto a conseguir aunar el espíritu de Vigo Contra el Cáncer -correr por la investigación contra el cáncer- con el proyecto al que serán destinados los fondos: BICAR (Bacterias Intestinales en Cáncer de Recto).
Desde este martes ya es posible inscribirse en la carrera. Como siempre, se desarrollará en sus dos modalidades habituales: 5 kilómetros -no competitiva, se puede hacer andando- y 10 kilómetros, una prueba cronometrada y con premios, incluida en el programa municipal de carreras populares Run Run Vigo.
La carrera Vigo Contra el Cáncer alcanzó la cifra máxima de 5.000 inscritos en 2019. El objetivo es volver a lograrlo en el presente 2022. El plazo para inscribirse en la prueba finalizará el 9 de octubre -aunque puede cerrarse antes en caso de alcanzar el número máximo de 5.000 participantes.
Las personas que deseen participar en la cita del 16 de octubre pueden formular su inscripción de dos maneras. Como en ediciones anteriores, es posible inscribirse online, en la página web de la asociación, o de manera presencial en la planta de deportes de El Corte Inglés. La inscripción trae consigo una camiseta conmemorativa de esta novena edición. También se ha habilitado un Dorsal 0, es decir, un dorsal solidario, que no incluye camiseta.
La carrera
La salida se dará desde la Avenida de Castelao, concretamente desde la zona de La Explanada, donde se celebran habitualmente las fiestas de Coia. El recorrido completará la avenida y continuará en línea recta hacia la Avenida de Europa. Avanzará aproximadamente hasta la Fundación Sales, donde hará un cambio de sentido para volver, continuará en dirección a la plaza de América hasta el túnel, y regresará a La Explanada, a la altura del punto de partida en la Avenida de Castelao.
Los participantes en la carrera de cinco kilómetros finalizarán así el recorrido, y a los corredores de la prueba de 10 kilómetros, puntuable para el circuito Run Run Vigo, les quedará por delante una segunda vuelta al mismo circuito.
Como cada año, se llevará a cabo también una prueba adaptada, que partirá a las 09.45 horas. Después se establecerán dos salidas más: primero la de 10 kilómetros (10.00 horas), y después la de 5 kilómetros (10:45 horas).
La Policía Local cortará los seis carriles de la Avenida de Castelao y de Avenida de Europa para garantizar así la seguridad de los participantes y de las miles de personas que visitarán Coia para disfrutar de la jornada.
Los dorsales podrán recogerse el sábado 15 (en horario de 10:00 a 21:00 horas en El Corte Inglés) o el propio domingo 16 en La Explanada de Coia (de 08:00 a 09:30 horas en el caso de los corredores de 10 kilómetros, y de 08:00 a 09:45 horas para la prueba de 5 kilómetros).
En esta novena edición también estará disponible el servicio de guardarropa. Se podrán dejar las pertenencias en él hasta media hora antes de la salida de su prueba. Los participantes y sus acompañantes también podrán participar en diversas actividades que completarán la jornada.
El proyecto de investigación
La Asociación Vigo Contra el Cáncer ha decidido que el 90% del dinero recaudado este año con la carrera irá destinado al proyecto de investigación proyecto Bacterias Intestinales en Cáncer de Recto (BICAR), que tiene como objetivo identificar perfiles poblacionales en la microbiota para poder predecir las respuestas al tratamiento de cáncer de recto.
El proyecto está liderado por la doctora Carme García Benito, oncóloga del Hospital Álvaro Cunqueiro, que cuenta con la colaboración de la doctora Clara González Ojea y los doctores Alberto Garrido Fernández y Alfredo Rodriguez Da Silva, del Servicio de Oncología y el Servicio de Microbiología del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi). Se desarrolla en el grupo de investigación de Oncología Traslacional del Instituto de Investigación Sanitaria Galicia Sur (IISGS).
Analizan el impacto de la microbiota en la respuesta terapéutica del cáncer de recto localmente avanzado. La microbiota intestinal -formada por más de 1.000 especies de bacterias-, favorece el mantenimiento de la buena salud mediante un equilibrio entre sus poblaciones bacterianas. Recientemente se ha demostrado que las variaciones en la microbiota que puedan alterar este equilibrio, van a favorecer el desarrollo de enfermedades; entre ellas, el cáncer.
El tratamiento del cáncer de recto localmente avanzado se realiza en primer lugar con quimioterapia y radioterapia, y en un segundo tiempo se opera. Alrededor de un 20% de los pacientes consiguen, con el primer tratamiento, eliminar el tumor antes de operarse. Esto se conoce como respuesta patológica completa. Sin embargo, el resto de pacientes van a presentar una respuesta variable, e incluso alguno de ellos empeorará durante el tratamiento.
La respuesta al tratamiento con quimioterapia y radioterapia es variable entre los diversos pacientes; esto llevó a los oncólogos del proyecto BICAR a cuestionarse la existencia de variables en cada paciente que provoquen las diversas respuestas a los tratamientos. Y así nació el proyecto, con el objetivo de localizarlas, identificar perfiles de poblaciones en la microbiota que permitan predecir la respuesta al tratamiento y, en consecuencia, poder aplicar a cada paciente un tratamiento más individualizado, que permita mayor precisión.
Para ello, estudian tanto la microbiota presente en el tejido tumoral, como en las heces de los pacientes de cáncer de recto, para posteriormente poner en relación estos datos con otros parámetros clínicos como la eficacia del tratamiento o las toxicidades presentadas. De confirmarse sus hipótesis, los resultados de este estudio podrían abrir la puerta a establecer estrategias terapéuticas individualizadas para mejorar las respuestas tumorales y aliviar efectos secundarios al tratamiento, así como servir de base para el planteamiento de otros estudios dirigidos a prevención y diagnóstico precoz de tumores colorrectales.