La canguesa paró el crono en 41.053, un tiempo superior al logrado en las semifinales del lunes, y se quedó a más de seis décimas de subirse al podio. Carrington fue la total dominadora de la regata, siendo la única palista que bajó de los 40 segundos (39.864). La eslovena Ponomarenko y la francesa Guyot fueron las otras dos participantes que superaron a Portela en esta final.
La morracense afrontaba con mucha ilusión y «a por todas» esta final tras las buenas sensaciones de las semifinales. Quería quitarse la espina de los Juegos de Londres de 2012, en los que se quedó en esta misma prueba a solo dos centésimas del podio. Esta vez, sin embargo, estuvo más lejos de la lucha por las medallas.
La palista canguesa, que acumula 14 medallas en Campeonatos del Mundo en su carrera, buscaba en Río de Janeiro su primer metal olímpico. Además de la cuarta posición lograda en Londres, posee también los quintos puestos logrados en los Juegos de Atenas 2004 y Pekín 2008 con el K-4 500 español.