Un vecino de Vigo de 60 años ha sido detectado tres días seguidos en la playa de Bouzas extrayendo almeja de forma ilegal pese a los avisos y denuncias de la Policía Local. Según ha informado el cuerpo municipal este lunes, la primera de las intervenciones se produjo el pasado viernes por la mañana, en torno a las 09:25 horas.
En ese momento, una patrulla observó a este individuo “cogiendo almejas”. Al constatar que carecía de autorización para realizar la actividad, lo identificaron y le intervinieron el marisco que tenía, que fue devuelto al mar. Sin embargo, apenas 24 horas después, a las 09:05 horas del sábado, en cooperación con el vigilante de la Cofradía, la misma patrulla localizó a esta persona en la playa.
Todo apuntaba a que estaba cogiendo marisco en el lugar, ya que el vigilante había visto a distancia lo que hacía. Según había comprobado, escarbaba en la arena de forma continuada para subir hacia la zona de rocas próxima al paseo con una bolsa en la mano.
Los agentes le sorprendieron en el momento que escondía el material entre unas rocas, donde guardaba aproximadamente 1 kilo de almeja fina. En un principio, el furtivo negó haberlas cogido pero tras explicarle que se le había observado durante minutos, no pudo rebatirlo.
La Policía le intervino el utensilio utilizado para escarbar en la arena, que fue entregado al vigilante de la Cofradía. Mientras, la almeja nuevamente fue devuelta al mar y el hombre fue propuesto para sanción ante la Consellería do Mar.
Por si estas dos actuaciones no fueran suficientes, la dotación aún intervino una tercera vez el domingo con este mismo sujeto, que a 08:30 horas ya estaba de nuevo en la playa de Bouzas, concretamente en la zona descubierta por la bajamar. En esta ocasión, se le decomisó una bolsa con 18 almejas. El hombre alegó que eran para consumo propio pero el marisco fue devuelto al mar.