Más furgonetas y más camiones, pero menos coches particulares. Así es el parque móvil de Vigo en base a los datos de matriculación del año 2019 que acaba de publicar el Instituto Galego de Estatística (IGE). El aumento de automóviles industriales se ve favorecido por los sistema de rastreo de vehículos que permite a las empresas optimizar el uso de sus flotas para sacarle todo el rendimiento posible y evitar gastos innecesarios.
Y es que la matriculación de camiones y furgonetas en Vigo ha recuperado los niveles que marcaba antes de las crisis y en el recién terminado año 2019 se registraron un total de 658 altas, la cifra más alta desde 2007, cuando fueron 1.060. En este alza influye sin duda la recuperación económica de las empresas del área durante los últimos años tras superar la grave depresión de la anterior década.
Las compañías con flotas de vehículos disponen también ahora de novedosos sistemas que les permiten ahorras costes. Se trata de los software de localización diseñados para que las compañías puedan calcular los tiempos de conducción, recorridos, rutas o comportimientos a la hora de conducir con el objetivo final de mejorar sus servicios al cliente.
En una ciudad como Vigo, donde cada día entran a trabajar cerca de 30.000 personas y otros 20.000 habitantes salen de la urge más grande de Galicia en dirección a sus puestos, la utilización del transporte por carretera es fundamental y la flota de vehículos industriales juega un papel determinante en la movilidad. Estos datos quedan reflejados igualmente en el IGE a la hora de analizar el flujo de la población en las principales ciudades gallegas.
Los datos del Instituto Galego de Estatística también indican que la matriculación de los coches particulares mantiene un descenso constante durante los últimos 15 años, de forma que la cifra se ha reducido a casi la mitad. En el año 2003 se dieron de alta en Vigo un total de 10.165 turismos, mientras que en el ejercicio 2019 que acaba de terminar fueron tan solo 5.905. La caída es generalizada y se puede confirmar con el balance registrado en la segunda ciudad de Galicia por tamaño, A Coruña, donde ha pasado de 10.995 turismos en 2003 a los 7.579 actuales.
El fenómeno contrario se produce en cuanto a las motocicletas y ciclomotores, un valor al alza especialmente en Vigo, donde se han puesto en marcha desde el Ayuntamiento medidas como carriles especiales para motos en vías de gran congestión, paso adelantados en los semáforos o eliminación de tasas municipales para todos aquellos vehículos de dos ruedas con una cilindrada igual o inferior a los 125 centímetros cúbicos.
En este caso, en Vigo se matricularon en 2019 un total de 1.426 motos y 43 ciclomotores frente a las 1.277 y 36, respectivamente, del año anterior y muy por encima de las 782 motos y 63 ciclomotores que se dieron de alta en 2013, aunque todavía lejos del récord de la ciudad olívica marcado en el año 2007, cuando se matricularon 2.679 motocicletas y 798 ciclomotores.