Simulación en una piscina. Ya se sabes cómo se las gastan los yanquis cuando se la tienen que jugar en la mar los miembros del cuerpo de Guarda Costas.
En las instalaciones que tienen en Carolina del Norte –que han costado unos 25 millones de dólares-, cuentan con una piscina cubierta en la que simulan situaciones en las que los aspirantes a socorristas se toparan en mar abierto, hasta el extremo de alcanzar un parecido a una fuerte tormenta o un huracán de categoría 1. Seguro que muchos recuerdan la película “La Tormenta Perfecta” –basada en una historia real de los pescadores de pez espada de la localidad de Gloucester (Massachusetts), donde George Clooney se la juega al mando de su pesquero, intentando remontar olas montañosas imposibles. Aunque, como escena de cine náutica, personalmente prefiero el momento en el que el buque de su majestad “Surprise” capitaneado por Jack Aubrey (Russel Crowe) cruza cabo Hornos en persecución del buque de guerra francés “Acheron” en la película Master and Commander.
Pues con más realismo en las instalaciones del Coast Guard pueden emular grandes olas, fuertes vientos, relámpagos, hundir la embarcación con vuelco incluido, ruido de los helicópteros de salvamento, y todo lo que se pueda uno imaginar para que el aspirante sepa a lo que se enfrentaran en una situación real.
Tras el apretón en la piscina, y demás pruebas superadas, los aspirantes logran su correspondiente titulo de socorrista del Coast Guard USA.