Construir un bote plegando. Es la idea que les vino a la cabeza a dos estudiantes británicos cuando asistían a un taller de origami en el Royal College of Art de Londres.
Max Frommeld y Arno Mathies trabajaron sobre la idea de construir un bote plegable de plástico bajo las premisas de fácil de transportar, su almacenamiento y el montaje; evidentemente que también fuese ligero. Y al final lograron poner en el agua una embarcación de 2,5 m de eslora y 1,5 m. de manga, que se puede utilizar en un entorno urbano (canales, estanques, lagos y pantanos).
Otras posibilidades. Además de ser una embarcación ideal para pescadores y campistas, ambos creadores piensan que tiene un gran potencial en situaciones catastróficas como inundaciones. Al ser fácil de transportar se podría utilizar para evacuar a personas aisladas por las inundaciones, etc.
Además, el FoldBoat lleva dos remos, con palas del mismo plástico que el casco. Y dos flotadores hinchables para sentarse y darle reserva de flotabilidad a la embarcación.
Más de 6.000 plegados. El material empleado para la construcción del FoldBoat permite que se pueda plegar millares de veces, según sus creadores más de 6.000 veces. Si hacemos un pequeño cálculo, un uso de 50 días al año, siempre plegando y desplegando el bote cada vez que lo usemos, tiene una vida útil de 120 años. ¡Qué barbaridad!
Por ahora están viendo la forma de producirlo en serie. Esperemos que el precio de 990 euros se abarate cuando salga al mercado.
Sus creadores, Max Frommeld y Arno Mathies, también están desarrollando otros proyectos, el último un trineo de nieve plegable.