Así, la XXVII Regata Ría de Vigo, durante todo el fin de semana en la bahía viguesa y auspiciada por la Fundación Club Náutico de Vigo, fue una primera demostración de fuerza de los clubes gallegos, que multiplicaron por tres su presencia sobre otras ediciones con unos 130 barcos en el agua.
Eolo decidió aparecer el sábado por la tarde y el domingo y, salvo los Fórmula Windsurfing, que únicamente tuvieron condiciones de viento adecuadas para dos pruebas (ganadas por Juan Vieito, del Liméns Wind & Sup Club), las flotas pudieron completar de cuatro (Optimist y BIC Techo 293) a seis regatas (420).
El fin de semana, desde luego, concitó interesantes duelos. En 420, con un año apasionante para la vela gallega (el Europeo júnior de 420 y 470 se celebrará en Vilagarcía del 23 al 30 de julio, pero antes también recibirá el Trofeo Ibérico, el 6 y 7 de abril, y el Campeonato de España, del 15 al 20), segunda victoria del año para Martín Wizner y Pedro Ameneiro (RCN Vigo), con 11 puntos (serie 2-2-1-4-1-1); vigués y pontevedrés hicieron valer su primer puesto en la sexta regata para arrebatar el liderato al arousano Jacobo García y al coruñés Toni Ripoll (RCN Sanxenxo), que contabilizaron igualmente 11 puntos (1-1-3-2-2-2) y que se dejaron el triunfo en la última prueba. Como en Sanxenxo una semana antes, Wizner y Ameneiro, campeones de Europa sub-19, se impusieron a los campeones continentales y mundiales sub-17. La regata, tanto para 420 como para windsurf, era puntuable para el ránking gallego.
Fue un fin de semana también de significados nombres. Gonzalo Araújo dejó los J70 y la vela pesada por unas horas y ganó la única regata que disputó en Láser Stándard (la primera), aunque la victoria fue para Eduardo reguera (Marítimo de Canido), con 7 puntos (2-1-1-2-1). Iago García (Marítimo de Canido) se imponía con una navegación casi impecable (1-retirada-1-1-1-1) en Láser 4.7. Con él, la saga de los García asegura su futuro, pues es hijo y sobrino, respectivamente, de dos regatistas de exitosa trayectoria en el Náutico vigués: los hermanos Antonino y Alberto García. Julio Tojo (Portosín) evitó que la clase Láser fuera monopolio de Canido y ganó con unos resultados fantásticos: 1-2-1-1-1.
En Snipe, Quique Porto y Alfredo Solís (RCN Vigo), con 16 puntos, vencían tras una apretada pelea frente a Gerardo Prego y Gonzalo Martínez (RCN Vigo-Marítimo de Canido), segundos (17), y Juan Luis Pérez-Lafuente y Carmen Blanco (RCR Galicia), terceros (18). Fue la clase con mayor reparto de triunfos, pues Javier Porto (RCN Vigo) y Carlos Castelao (RCN Galicia), quintos, y Juan Manuel Estévez (RCN Vigo) y Lara Lagoa (Comisión Naval de Marín), sextos, también se apuntaron victorias parciales.
Mientras Pablo González (CN Cangas) apenas concedía opciones a sus oponentes en BIC Techno 293 (1-1-1-2) y otro Pablo, Cabello, con David Fernández (RCN Vigo), se imponía en Vaurien (8 puntos, 2-1-1-2-1-1), en Optimist la pelea por el podio se convirtió en una batalla entre el Marítimo de Canido y Stella Enríquez (RCN Vigo). Canido metió dos barcos -Liang Jane acabó primera con 9 puntos y unos resultados inalcanzables de 1-2-2-5, mientras que su compañero Andrés Barreiro cerró el podio con registro de 10-6-3-1 y 20 puntos- y el Náutico a Enríquez como subcampeona (18 puntos, 13-1-1-3).