El periodista Alejandro Alonso, «Dury», falleció la noche de este 10 de diciembre a los 62 años en el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo. El vigués, natural de la parroquia de Matamá, pionero del periodismo náutico español y colaborador de VIGOÉ desde su fundación en 2015, murió tras una larga enfermedad que obligó a su ingreso en los últimos días de noviembre.
Con la marcha de Dury el periodismo vigués pierde al pionero de las crónicas náuticas en la historia moderna de la ciudad, pero también al hombre que puso en marcha competiciones que hoy siguen activas como la prestigiosa medio maratón VIG-BAY.
Los inicios de Atlántico Diario, en los años 80, contaron con su sección náutica y las páginas del periódico vigués fueron testigos del nacimiento del proyecto deportivo gallego de mayor éxito de la historia: «Galicia 93, Pescanova». En aquella aventura forjó su gran amistad con el gran patrón Javier de la Gándara y contó para todo el mundo la increíble circunnavegación que entre 1993 y 1994 colocó a la tripulación viguesa en el epicentro de la náutica internacional.
Otros grandes eventos como la MedCup, nacimiento de la competición de los monotipos TP52, contaron con la experiencia de Dury Alonso en su equipo de comunicación. Experto en navegación oceánica y fan incondicional de las grandes regatas organizadas desde Francia (Vendee Globe, Ruta del Ron, Jules Verne…), escribió decenas de artículos en VIGOÉ sobre los más variados temas.
Asesor de la Real Federación Gallega de Vela y de atletas como Elías Domínguez, el suplemento náutico del diario ABC también contó con la pluma del periodista vigués, que el pasado verano acudió a la entrega de los Premios Nacionales de Vela para recoger el galardón de Pablo Santurde.
A través de su blog (pontoon) también desgranó durante años los entresijos de la náutica nacional e internacional. Lo hacía de forma directa, muchas veces con artículos que no gustaban a todos los protagonistas, pero siempre desde sus firmes convicciones y con la manera vehemente con la que transmitía la realidad que percibía.
Este 10 de diciembre, Dury Alonso se puso a la caña de su barco una vez más para ordenar la última virada. Descansa en paz. Se quedan para siempre sus crónicas. ¡Hasta siempre Dury!