A estas dos coincidencias es preciso añadir que el gobierno gallego también está en manos del mismo partido, igual que el gobierno de España. Asimismo, es preciso añadir que la Autoridad Portuaria de Marín está en manos de José Benito Suárez Costa, casado con la ministra Ana Pastor e íntimo amigo del Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, con quien comparte sus paseos estivales.
De unos pocos años a esta parte, el puerto de Vigo se va hundiendo cada vez con mayor rapidez. Por unos motivos o por otros, las grandes compañías se están marchando de Vigo. Por contra, el puerto de Marín, a la vista de los ciudadanos de a pie, va creciendo a costa de este desmantelamiento. Cierto que el puerto portugués de Leixoes también ejerce una competencia e influencia en contra del de Vigo. Pero a todo esto hay que añadir que los grandes trasatlánticos también empiezan a decantarse por el puerto de A Coruña, que no ofrece las mismas condiciones de abrigo, ni la bonanza marítima ni las infraestructuras portuarias que el de Vigo, y que seguramente es la consecuencia de unos costes más competitivos —habría que preguntarse por qué en Vigo no se puede competir de esa manera—. Sea como fuere, el puerto de Vigo va desinflándose —lo van desinflando—. El colmo de todo ello es que ahora, el presidente de la Autoridad Portuaria de Vigo, López Veiga, incluso en contra de los propios usuarios, que no terminan de comprenderlo y de aceptarlo, dice que la Lonja de Vigo no es rentable y que habrá que privatizarla, como un aciago anuncio de algo que ya casi da por seguro.
Todo ello resulta muy casual y suscita muchas preguntas. López Veiga siempre ha gozado de una gran reputación dentro y fuera de su partido, y siempre se le ha considerado como un conocedor del complejo mundo de la pesca. Recordemos que asumió la Consellería de Pesca desde el año 1990 al 1993; la Consellería de Pesca y Asuntos Marítimos desde el año 2001 al 2005; y que está asumiendo la presidencia de la Autoridad Portuaria de Vigo desde el año 2015. Tiene fama de hombre cercano y honrado. ¿Por qué, entonces, no dimite de su cargo para salvar una consideración general que está perdiendo? ¿Por qué permite que el Puerto de Vigo se esté desmantelando? ¿A quién beneficia todo esto? ¿Qué está pasando realmente en el Puerto de Vigo?