Estas fotografías, con la Gran Vía de Vigo totalmente desmantelada, quedarán para la historia de la ciudad. Se trata de una de las actuaciones urbanas más importantes llevadas a cabo en las últimas décadas, junto con otras no menos relevantes.
Es preciso reconocer que el alcalde Abel Caballero, al frente del Concello de la ciudad de Vigo, ha conseguido transformar la urbe durante las últimas décadas haciéndola más humana y generando un sentimiento de orgullo entre la población.
Dentro de poco, las rampas mecánicas permitirán subir fácilmente el tramo norte de la Gran Vía hasta la Praza de España, lo cual tendrá una notable repercusión económica en toda la zona. Es de prever que en un futuro las rampas mecánicas también se extiendan por el lado sur de la Gran Vía llegando a la Praza de América y serán un ejemplo a seguir en otras poblaciones.
Al cabo de las últimas legislaturas, la ciudad de Vigo se ha ido llenando de rampas, de ascensores y de escaleras mecánicas para hacer más humana una ciudad que siempre ha sido conocida por sus atractivos naturales y también por su difícil orografía, por sus numerosas cuestas. Pero todo esto está cambiando porque las barreras están desapareciendo. Así se escribe la historia.