Hoy, queridos lectores, querría comentarles dos o tres cosas. En primer lugar, mi cálida enhorabuena a la cúpula del PP de Galicia por el próximo nombramiento del exalcalde vigués Manuel Pérez, como nuevo presidente del Consello Económico Social de Galicia.
Y quizá me dirán Vds, ¿y? Pues les diré que el CES es un organismo u órgano de carácter consultivo en materia socioeconómica, sobre todo en materias de especial trascendencia económico-social. El Consello emite un informe anual sobre la situación económica de Galicia que presentan con gran boato.
En este cargo, el de presidente del consello, se suele ver a políticos que ya no pintan mucho en su partido, me estaba acordando ahora de doña Corina (‘Perly’) Porro, que también presidió el organismo. Con esta señora tuvo el que escribe un rifirrafe por hacerle una ligera crítica cuando ella presidía el CES compostelano. Cuando hablé brevemente con ella me dio la impresión de que era una política con la mandíbula de cristal porque soportaba bastante mal las críticas (educadas) a su gestión.
Pero volviendo a don Manuel Pérez hay que decir que fue alcalde de Vigo en las filas del PP por mayoría absoluta entre 1995-1999. Todavía hay vigueses que le recuerdan porque fue de dominio público que su vicepresidente en Santiago, Pepe Cuiña (q.e.p.d.), no paraba de ponerle palos en las ruedas en su gestión municipal, porque en el PP compostelano (y en el coruñés) no se permitía (y no se permite) que Vigo pudiera asomar la cabeza. Y don Manuel (Pérez) tragaba y no decía absolutamente nada teniendo detrás a la mayor ciudad de Galicia.
Bueno, pues este es don Manuel Pérez que por cierto presidirá el CES a la tierna edad de 76 años. Se ve que en el PP gallego apuestan por la juventud en los cargos de relevancia.
El alcalde no escucha a Guns N’ Roses
Cambiando de tercio diremos que tenemos un alcalde un tanto pintoresco (me gusta más que populista). Baila break y todo tipo de bailes modernos, se sube a la bici de O Marisquiño y sobre todo habla mucho. Y es que don Abel es un gran hablador, le encanta comentar todos los temas que afectan a la ciudad. Bueno, en fin, de todos exactamente no. Hay aspectos de su gestión que le producen una cierta afonía, o como mucho responde «eso ya lo he contestado», y deja al periodista de turno con un palmo de narices.
Estos temas delicados pueden ser el pasado concierto veraniego de Guns N’ Roses en nuestra ciudad, la plantilla de nuestros bomberos o los problemas laborales de la empresa Vitrasa.
De esta concesionaria de bus urbano, Caballero no gusta hablar y si lo hace es para cargar contra sus trabajadores echándoles la culpa de los paros en el servicio. Alcalde, ¿Vd. socialista acérrimo criticando a los empleados de la empresa viguesa de transportes? Aquí hay algo que no cuadra, y quizá algún día don Abel nos lo podrá aclarar.
Con don Abel se cumple el teorema que dice que las maneras democráticas de un político son inversamente proporcionales a la duración del mismo en el cargo.
La nueva libertad (?) de expresión
Hace pocas fechas el exfutbolista Alfonso Pérez, que llegó a jugar en R. Madrid y FC Barcelona, hizo unas declaraciones donde decía: «El fútbol femenino no es comparable con el masculino porque éste genera muchos más ingresos y tiene mucha más repercusión mediática». Al poco tiempo la alcaldesa de Getafe y el presidente del club de fútbol de la localidad, emitían un comunicado conjunto donde comunicaban que retiraban de forma inmediata el nombre de Alfonso Pérez del Coliseum getafense.
Decía el periodista deportivo José María García que al llegar al diario Pueblo, en plena dictadura franquista, le dieron a elegir entre política local y la sección de deportes. García mencionaba que eligió ésta última porque suponía que en ella sufriría menos censura que escribiendo de política aunque ésta fuera local.
Años más tarde a José María se le ocurrió criticar la gestión del ministro Pío Cabanillas cuando gobernaba la UCD en 1981, por lo que fue amonestado por la empresa. Al siguiente programa y antes de finalizar el mismo, el periodista terminó diciendo: «Y del tema en el que están Vds. pensando no pienso decir …ni pío». Fue el adiós de García en la Cadena Ser.
En esta época (actual) en España donde la democracia y la libertad de expresión son puramente virtuales, tengan mucho cuidado, estimados ciudadanos, con emitir alguna crítica pública sobre los temas sensibles sobre los que ‘el poder’ nos quiere educar. ¿Que cuáles son estos temas? Vean Vds. cualquier telediario y lo sabrán.
Por cierto, ya que el estadio getafeño se ha quedado sin nombre, yo humildemente propongo uno que se me ha venido a la cabeza en este momento, y es el de Almudena Grandes, al igual que la madrileña estación de Atocha.
El que escribe, después de estas líneas, sólo pide que no le quiten su nombre al estadio Fernando Torres de Fuenlabrada. Tampoco es mucho pedir.