En el momento de escribir este comentario han puesto un anuncio en la primera cadena de la televisión española que me ha gustado, pero que también me ha sorprendido. El próximo jueves harán un homenaje de Estado a las víctimas del Covid19 presidido por el Rey Felipe VI. El homenaje me parece correcto y necesario para agradecer el esfuerzo de los profesionales de la sanidad, de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, y para acompañar, también, a las víctimas que han sobrevivido a la pandemia y a las familias de quienes no la han podido superar. Hasta ahí, todo correcto.
Lo que me ha sorprendido negativamente es que los medios de comunicación españoles no se hubieran hecho eco del multitudinario homenaje llevado a cabo en Barcelona el pasado jueves día 9 de julio. El acto oficial fue en Montjuic, pero se irradió a todos los barrios y rincones de la ciudad condal con música y poesía, en los patios de manzana, en las plazas y en los jardines. Quienes estuvieron allí hablan de una participación muy emotiva y multitudinaria de todas las clases y condiciones sociales, comparando esa participación con la que hubo en los Juegos Olímpicos de Barcelona de 1992.
Sin embargo, como digo, los medios de comunicación del resto de España no se hicieron eco de ese homenaje del día 9 de julio en Barcelona y ahora, en cambio, anuncian uno a nivel de Estado en Madrid el próximo jueves día 16. Todo esto me conduce a varias preguntas. Con ese silencio de los medios con respecto al acto catalán, ¿no estará contribuyendo el resto de España a ese separatismo que tanto se critica? ¿De dónde parte el odio del que tanto se habla? ¿Quién o quiénes se benefician realmente con todos estos silencios? ¿Madrid es el ombligo de España?