Este 22 de julio se celebra el Día Mundial del Cerebro, una fecha que fue fijada por la Federación Mundial de Neurología debido a la necesidad de concienciar sobre su potencial, riesgos y enfermedades. Una promulgación de carácter urgente por considerar que el 90% de los casos de ictus se podrían evitar con una adecuada prevención de los factores de riesgo y la metodología de un estilo de vida saludable.
Según los datos, el ictus es la segunda causa de muerte en España —la primera en mujeres—, la mayor causa de discapacidad adquirida en la edad adulta —cada vez más precoz— y la segunda de demencia. En Galicia existen alrededor de 35.000 personas con daños cerebrales adquiridos por un ictus o traumatismo craneoencefálico. Secuelas que se presentan en diferentes grados o intensidades según la persona.
La Federación Mundial de Neurología informa que un porcentaje importante de enfermedades neurológicas se pueden prevenir controlando los factores de riesgo vasculares, la presión sanguínea, los niveles de colesterol y llevando una dieta sana. Los malos hábitos, la obesidad y el sedentarismo son los peores enemigos para nuestro cerebro.
¿Cómo podemos controlar los factores de riesgo?
A pesar de que nadie está exento de la visita de un ictus, podemos influir y controlar los factores de riesgo mediante hábitos modificables en nuestra propia conducta. No solo evitará su aparición, sino también mejorará la calidad de vida. A continuación, se citan algunos hábitos para incorporar a nuestra rutina:
- El tipo de alimentación es vital para la salud de nuestro cerebro. Beber abundante agua y la ingesta diaria de fruta y verduras es primordial. Así mismo, debe reservase un lugar importante para el pescado, legumbres y frutos secos. Utilizar aceite de oliva o canola es muy beneficioso para la salud cerebral. Por supuesto, cabe mencionar la importancia de evitar la ingesta de azúcar, sal, harinas, bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados.
- El ejercicio físico proporciona al cerebro la liberación de mediadores químicos altamente favorables para su funcionamiento óptimo, así que la práctica de deporte de cualquier tipo o caminar cada día trae múltiples beneficios psíquicos.
- Dormir al menos ocho horas sin interrupciones es una de las mejores medicinas para el cerebro. Limitar el uso de aparatos electrónicos antes de acostarse ayuda a tener un ciclo del sueño plácido y duradero.
- Mantener actividad social e intelectual es importante. El compartir momentos positivos con un círculo social de confianza, así como cultivarse con la lectura de libros y/o aprender nuevos conocimientos que amplíen nuestros horizontes, hace que las neuronas se mantengan activas y conectadas y eviten enfermedades cognitivas.