El comité de empresa del hospital vigués Povisa (del grupo Ribera) ha anunciado este viernes la convocatoria de una huelga de cuatro días, entre el 17 y el 20 de abril, que se convertirá en paro indefinido a partir del 24 de abril, si no hay acuerdo antes, por el bloqueo en la negociación de su convenio y la pérdida de poder adquisitivo.
Según ha explicado en rueda de prensa la presidenta del comité, Chus Neira (CIG), el último convenio firmado entre trabajadores y empresa data de 2010. En 2021 se empezó a negociar un nuevo acuerdo, pero aún no se ha cerrado nada, aunque hubo un preacuerdo el año pasado para una subida salarial del 2,5% y para ampliar el horario a ciertos trabajadores (de 35 a 40 horas semanales), aunque el resto de acuerdos “no se cumple”.
La presidenta del comité ha señalado que la empresa se empeña en vincular el convenio con el concierto que Povisa tiene con el Sergas, y que se está negociando actualmente. En las últimas horas, el hospital ha presentado una propuesta a los trabajadores, que incluye subida salarial del 3% para este año y los dos siguientes, “aunque quieren retirar algunos pluses”, “no permiten fraccionar las vacaciones como quiere la plantilla” y “no está claro el tema de la jornada”.
Así las cosas, Chus Neira ha señalado que el comité trasladará este viernes en asamblea a los trabajadores la medida de convocatoria de huelga, así como la realización de concentraciones frente al hospital los próximos 11 y 13 de abril.
“El problema es que llevamos muchos años sin subida salarial, y hemos perdido muchísimo poder adquisitivo”, ha apuntado la portavoz del órgano de representación, que también ha advertido de que “las condiciones laborales tienen que mejorar”.
Al respecto, ha señalado que el grupo Ribera “ya sabía” la situación de la plantilla cuando compró el hospital, y que tampoco “es problema de los trabajadores” la negociación del concierto con el Sergas. “Nos parece una barbaridad que pretendan vincular el convenio con el concierto, porque implicaría que en nuestra vida vamos a depender de lo que decida el Sergas, y eso no puede ser”, ha apostillado, al tiempo que ha lamentado que a la Consellería de Sanidade “le importa un pimiento” la situación en la que está la plantilla de este hospital vigués.
Los representantes de los trabajadores han pedido una subida salarial del 5% para este año y del 4% para los dos siguientes, algo que “no es nada desorbitado”, y han apuntado que podrían ceder en esta cuestión a la baja, siempre y cuando el resto de cláusulas del convenio se ajustasen a sus demandas.
Finalmente, han lamentado que el colectivo médico de Povisa se haya desmarcado de estas medidas de presión y han recordado que “de lo bueno que se consiga en el convenio, ellos también se van a beneficiar”.