El Grupo de Neurociencia Traslacional del Instituto de Investigación Sanitaria Galicia Sur (IISGS), situado en el Hospital Álvaro Cunqueiro y dirigido por el doctor José Manuel Olivares, trabaja en la búsqueda de moléculas en sangre que puedan ayudar a los psiquiatras en sus diagnósticos y a decidir el mejor tratamiento para cada paciente. Uno de los campos que están estudiando es la esquizofrenia, cuyos síntomas más comunes son alucinaciones, delirios, desorganización del pensamiento, lenguaje y/o comportamientos extraños, y que en muchos casos acarrea importantes dificultades para que las personas se realicen a nivel personal, familiar y social.
El origen de la esquizofrenia se asocia a factores diversos, unos intrínsecos (como la herencia genética, por ejemplo) y otros extrínsecos (como el estrés, abuso de sustancias, infecciones virales o complicaciones obstétricas). Los primeros síntomas de la enfermedad suelen manifestarse en la mayoría de los casos en la adolescencia o al inicio de la vida adulta, siendo más prematuro en individuos del sexo masculino.
Aunque la esquizofrenia es un trastorno en muchas ocasiones incapacitante, el diagnóstico y el tratamiento precoz permite reducir el impacto del trastorno y proporcionar una vida funcional al paciente y una correcta calidad de vida. Asimismo, administrar un tratamiento adecuado para frenar o retardar la progresión de la esquizofrenia es un paso crucial para disminuir lo deterioro cognitivo, funcional y social que sufre el paciente con el paso del tiempo.
Tesis doctoral de los biomarcadores en la sangre
Fruto de estos trabajos del grupo de Investigación es la Tesis Doctoral titulada “Esquizofrenia: la búsqueda de potenciales biomarcadores periféricos”, defendida en la Universidad de Vigo el pasado mes de enero por Daniela Rodrigues-Amorim, que obtuvo la calificación de sobresaliente cum laude, y fue dirigida por los doctores José Manuel Olivares y Carlos Spuch.
Según explica la autora de la investigación, Daniela Rodrigues-Amorim,”el objetivo era buscar moléculas en muestras de sangre que ayudaran en el diagnóstico, pronóstico y reconocimiento de un patrón neurodegenerativo de la esquizofrenia.
Se trata de conseguir desarrollar un panel de biomarcadores en sangre que ayuden a los psiquiatras en su trabajo diario para diagnosticar, tratar y entender la evolución de esta enfermedad, con una aplicabilidad inmediata en la práctica clínica y una repercusión directa en el paciente”.
En la primera publicación de los hallazgos de este trabajo se describía tres moléculas que podrían medirse en sangre como potenciales biomarcadores de diagnóstico y pronóstico en la esquizofrenia. Posteriormente, se identificaron otras tres moléculas asociadas a la neurodegeneración en esta enfermedad, en un grupo particular de pacientes que presentaban una evolución más grave del trastorno, asociada a la falta de respuesta al tratamiento habitual.
Este segundo hallazgo, también publicado en una prestigiosa revista de la especialidad, supone un avance en la comprensión de la esquizofrenia y la identificación de tres potenciales biomarcadores de neurodegeneración y progresión del trastorno.
Posible origen molecular de la esquizofrenia
Por último, el grupo identificó otras cuatro moléculas asociadas al daño neuronal, permitiendo generar una nueva teoría sobre el origen de la esquizofrenia, según la cual, componentes que están entre las células (denominado matriz extracelular) podrían provocar las alteraciones en el funcionamiento de las mismas.
Este último hallazgo fue ya aceptado para su publicación en la revista Cellular and Molecular Neurobiology (2021), el director de este Grupo de Investigación, doctor Olivares, concluye que “como sucede con los trabajos de investigación que buscan respuestas a problemas científicos, esta tesis abren la puerta a otras incógnitas aun más excitantes, ya que supone el primer paso para poder desarrollar sistemas de detección con ayuda de la nanotecnología y los biosensores, y por qué no, abrir la puerta a una nueva hipótesis sobre la posible origen molecular de la esquizofrenia”.