La secretaria xeral técnica de la Consellería de Sanidade, Natalia Lobato Mosquera, ha avanzado este jueves que la Xunta prevé adjudicar la próxima semana el servicio de transporte urgente en el área de Vigo, contratado por el procedimiento de emergencia tras el plante de la empresa adjudicataria, inmersa en un conflicto laboral con los trabajadores.
Así lo ha dicho en respuesta a una pregunta formulada en la Comisión 5ª de Sanidad del Parlamento por la diputada nacionalista Montse Prado, que ha alertado de la «situación realmente grave» en la que está este servicio, algo que está «comprometiendo la calidad», poniendo «en riesgo la salud» de los pacientes del área y vulnerando «los derechos del cuadro de personal». «La gravedad de la situación no es compatible con la poca prisa de la Xunta por solucionar el problema», manifestó la nacionalista, denunciando que la situación en el servicio «pone en riesgo la salud y la vida de los vecinos y vulnera los derechos del personal», gracias al cual las ambulancias siguen trabajando.
En relación a este servicio, Lobato Mosquera ha recordado que el pasado lunes, día 13, la Fundación 061 dio cuenta en el Consello de la Xunta de la contratación por la vía de la emergencia del servicio del transporte sanitario urgente en el área de Vigo, un expediente que se extenderá durante el tiempo «estrictamente necesario», mientras se tramita un nuevo procedimiento de contratación abierto. La previsión es que esta adjudicación por la vía de emergencia se haga efectiva la próxima semana.
Por otra parte, en lo relativo al transporte sanitario no urgente, la responsable autonómica ha recordado que se encuentra ya en proceso de contratación.
Natalia Lobato ha puesto en valor que los nuevos contratos que se han licitado, tanto la Fundación Pública Urxencias Sanitarias 061 (responsable del transporte urgente), como las diferentes áreas sanitarias (responsables del transporte no urgente), ya incorporan las mejoras derivadas del nuevo convenio colectivo del sector, en aras de garantizar los derechos laborales de los trabajadores.
En su intervención, ha asegurado que tanto Sanidade como el 061 realizan «un seguimiento permanente del funcionamiento del servicio de transporte sanitario» en el área de Vigo, que atiende a las necesidades de las más de 339.000 personas que integran este área sanitario.
En este marco, ha destacado, se realizan inspecciones comunes –una al semestre– y extraordinarias y, cuando se detectan incidencias, se aplican las correspondientes penalidades.
Finalmente, la secretaria xeral técnica también ha apuntado que, ante el conocimiento del retraso en el pago de las nóminas del mes de marzo, y las denuncias presentadas ante la Inspección de Trabajo, el pasado mes de abril se inició el procedimiento de intervención de este servicio, destacando que, en la actualidad, los trabajadores ya percibieron la nómina.
Nueva reunión entre Sergas y trabajadores
Y todo ello mientras los trabajadores de Ambulancias del Atlántico y el Sergas se emplazaron este jueves a una nueva reunión para intentar poner fin al conflicto laboral con la empresa adjudicataria del servicio.
Tal como han informado los sindicatos en un comunicado conjunto, la Consellería de Sanidade los ha convocado para este jueves, esperando que en la reunión se acuerden «compromisos concretos» para el cobro de las cantidades que se les deben a los empleados.
Además, esperan que se hable del traspaso del servicio a una nueva empresa «lo antes posible», pero siempre «manteniendo los derechos conquistados durante estos últimos años». El lunes, los trabajadores se reunirán en asamblea para votar los acuerdos y avances obtenidos.
Y los resultados de ese encuentro fueron positivos ya que CC.OO., CIG y USO han informado, en un comunicado conjunto, del acercamiento de posturas con Sanidade para seguir abordando la situación del transporte sanitario urgente y programado en Vigo, Moaña y Cangas, y han explicado que la Xunta ha aceptado formalizar la intervención de Ambulancias do Atlántico (concesionaria del servicio) con el nombramiento de tres técnicos para encargarse de la dirección de la empresa, y superar así el mero papel de «supervisor».
Planificación estival
Además, en la sesión parlamentaria de esta semana, el gerente del Sergas, José Ramón Parada Jorgal, ha apuntado que la dirección de Atención Primaria de Vigo está en contacto con los profesionales de los centros de salud para planificar y «solucionar eventuales incidencias» que se puedan producir durante el verano, así como para diseñar los planes que «permitan adoptar de forma ágil las medidas necesarias» para la adecuación de los recursos asistenciales.
Parada Jorgal también ha comparecido en la Comisión de Sanidade, en su caso para responder a una pregunta formulada por la diputada socialista Elena Espinosa sobre la necesidad de implantar en Vigo un «plan de contingencias» que evite «las deficiencias que se registran año tras año» en esta área. Según señaló la socialista existe «un clamor en la calle» por el «colapso» que se vivió el verano pasado en la ciudad, sobre todo, en lo referente al ámbito de pediatría, exigiendo a la Xunta que garantice que “todos los niños y niñas en edad pediátrica que lo necesiten puedan tener asistencia sanitaria por personal especializado”, después de que el pasado verano 3.000 niños y niñas habían quedado sin consulta pediátrica, lo que “nos debe de alarmar a todos”, dijo.
Frente a eso, el gerente del Sergas ha acusado a los socialistas de tener «una visión claramente manipulada de la realidad», incidiendo en que la demora media para una cita presencial con el médico de familia en Vigo «es de 5,7 días», frente a los 9 días del resto de España.
Además, ha concretado, en esta área el 35% de los pacientes fueron atendidos por su médico de familia en menos de dos días, y el 59% en menos de cuatro. Respecto a la atención pediátrica, también criticada por los socialistas, ha asegurado que la demora media para una consulta es de dos días.
José Ramón Parada también se ha referido a la situación del Punto de Atención Continuada (PAC) de la ciudad olívica, donde «se aumentó la dotación con un médico de manera permanente».