El hospital vigués Povisa ha homenajeado este martes a sus profesionales de Enfermería con un vídeo dedicado a este colectivo, “siempre importante y necesario” pero que ha sido “clave e imprescindible” para superar la crisis sanitaria provocada por el Covid-19. En el Día Mundial de la Enfermería, el centro ha querido agradecer a estos profesionales su “dedicación y sacrificio”: “Vuestra valentía y cariño con los pacientes son todo un ejemplo”, recuerdan desde Povisa.
El vídeo, dedicado a todos los profesionales de la Enfermería, habla de la vocación, de la capacidad de sacrificio y entrega a los demás que tienen enfermeros y enfermeras y del compañerismo. “Todos somos un equipo, actuamos como una sola cabeza y arrimamos el hombro sin pensarlo dos veces”, asegura una de las profesionales. Y tan importante como ese trabajo en equipo es la empatía con el paciente, esa conexión casi instantánea que de manera natural establecen con quienes más les necesitan. “Siempre piensas que podrían ser tus padres, tus hermanos o tus abuelos”. Y todo ello, a pesar de que en situaciones como la provocada por el Covid-19, en muchos casos haya supuesto alejarles de sus propias familias para protegerles.
Es por todo ello que Enfermería es clave no solo para curar sino también para cuidar de los pacientes. Lo ha sido siempre y todavía más en el caso de los pacientes afectados por la pandemia porque este virus obliga a su aislamiento y el personal sanitario era el único con acceso a ellos. Y estos profesionales se han volcado con las muestras de cariño con estos pacientes, aún detrás de las mascarillas y trajes de protección, y gracias a ellos los hospitales del grupo Ribera Salud, al que pertenece Povisa, han podido llevar a cabo importantes acciones de humanización con los pacientes como las videollamadas para contactar con sus familias e incluso con sus mascotas, o la lectura de cientos de mensajes de ánimo y apoyo que ha recibido el grupo sanitario para transmitir a los ingresados.
Para todos ellos, la recompensa es su propio trabajo: “Nuestro mayor regalo no es que nos aplaudan, es que los pacientes estén bien y que salgamos de ésta”, reflexionan.