El Hospital Vithas Vigo ha incorporado un nuevo dermatoscopio de vídeo digital y mapa de lesiones cutáneas que permite escanear y almacenar las imágenes de las manchas de la piel; y recuperarlas para comprobar su evolución a lo largo del tiempo, un dato que resulta fundamental para la detección y prevención temprana del melanoma y otros cánceres de piel.
El equipo es uno de los más modernos para la detección precoz de lesiones melanocíticas pigmentarias y del melanoma, ya que se presenta, como una evolución del videodermatoscopio digital clásico, tanto en software como en su hardware. “Gracias a la lente de alta calidad con aumentos de entre 7 y 150 veces, permite una excelente resolución. Estos distintos niveles de aumento permiten una mejor visualización no solo de la estructura del lunar, sino también de los otros componentes de la piel y los vasos”, explican desde el centro médico, que realiza esta adquisición poco antes de que este domingo se celebre en Europa el Día de la Prevención del Cáncer de Piel, instituido por la UE.
La dermatóloga Carmen Rodríguez Cerdeira, responsable de la Unidad de Lesiones Pigmentadas del Hospital Vithas Vigo, destaca la importancia de una detección precoz del melanoma y de otros cánceres de piel para lograr un rápido diagnóstico y un tratamiento lo más adecuado y temprano posible. Por eso, pone en valor la ventaja que ofrece este equipo de poder comparar las imágenes almacenadas de manera que se puede ver la evolución de la mancha a lo largo del tiempo. Del mismo modo, permite hacer un mapa de lesiones cutáneas de cada paciente, de manera que se crea una especie de historia clínica dermatológica para cada uno de los pacientes.
Otras ventajas de este nuevo equipo es que permite la visualización de pelos, uñas y barba, lo que se considera una visualización ampliada del apéndice de la piel; además de facilitar la video-capilaroscopia para el examen de los capilares y detección de posibles problemas de microcirculación. También se utiliza en el diagnóstico de sarna y en la detección de ácaros y otros parásitos.
En este sentido, la Rodríguez Cerdeira asegura que son diversos los factores a tener en cuenta para diferenciar un lunar benigno o nevus (no canceroso) y un melanoma: la asimetría, el borde, el color, el diámetro y la evolución. Así, los lunares son redondos y simétricos, con bordes regulares de color marrón claro u oscuro, pero homogéneo y, habitualmente, de menos de seis milímetros. Además, no cambian con el tiempo. Por su parte, los melanomas son asimétricos, con bordes irregulares, con colores no homogéneos de más de seis milímetros y suele crecer con el paso del tiempo.
Precisamente para ver los cambios a lo largo del tiempo es donde más útil resulta este equipo que forma parte de la importante renovación de material médico que está emprendiendo el Hospital Vithas Vigo a lo largo de los últimos años.