Es una asociación constituida en el año 1963 y sin ánimo de lucro. Desde esa fecha su actividad ha sido incesante, y cuentan con un centro ocupacional, un centro de día, un centro educativo, y una vivienda tutelada. En esas dependencias llevan a cabo una labor muy necesaria y encomiable, una labor que con enorme esfuerzo ha pretendido llenar un vacío que las instituciones públicas no ha sabido —o no han querido— resolver adecuadamente. En muchos hogares se vive un drama familiar por el problema que constituye el tener en su seno una persona con discapacidad psíquica, un drama acrecentado por la falta de medidas y apoyos oficiales. Pero desde el año 1963 a esta fecha, Aspanaex ha conseguido unir a las familias con algún miembro con discapacidad psíquica, y ha conseguido, también, ganarse el apoyo de una ciudadanía que acude con regularidad a su llamada un año tras año en la conocida “Marcha Aspanaex”, con el objetivo, en esta ocasión, de construir una residencia para mayores. Todo el apoyo es poco para arropar a Aspanaex, una asociación que protege a estas personas con discapacidades psiquicas y a sus familias, que ahora ya no están solas.