Las joyas antiguas siempre son objetos personales que llevan consigo un recuerdo sentimental, bien porque han sido regalos especiales o porque se han heredado de seres queridos, pero con el paso del tiempo, dejan de utilizarse y, en ocasiones, no se sabe muy bien qué hacer con ellas. En los últimos años, ha crecido considerablemente la venta de joyas de segunda mano y puede resultar una opción bastante interesante para todas aquellas personas que les interese conseguir un beneficio económico a cambio de sus queridas joyas.
Mediante este artículo, os vamos a explicar las mejores maneras de realizar una venta de joyas usadas, incluso os vamos a informar sobre los lugares adecuados para realizarlo, continuad leyendo:
Evaluación de la joya
Lo primero que hay que saber es el valor real de la joya que queremos poner a la venta mediante una evaluación que la debe realizar un equipo experto en joyería para que, mediante diversas técnicas, vean la calidad de los metales, comprueben su autenticidad, su calidad y los posibles desperfectos. En el caso de que tenga engastada una o varias piedras, será necesario acudir a un profesional de gemología para que pueda indicar con exactitud de qué tipo de piedra se trata, su pureza y su valía. Una vez examinada la pieza, se procede a la tasación para determinar su valor, para eso tienen en cuenta las dimensiones, el peso en quilates de la piedra o de los metales preciosos y su estado. Cuando realizan la tasación, los profesionales se ajustan al precio que marca el mercado en ese momento.
Lugares de venta de joyería usada
Uno de los puntos más importantes en este proceso es elegir bien el lugar donde se pretende realizar la operación. Es recomendable acudir a lugares que se dedican específicamente a vender joyas usadas para realizar una venta segura y satisfactoria. En el mundo de los negocios siempre hay personas que se intentan aprovechar del desconocimiento de los demás, por eso, insistimos en la precaución que se debe tener a la hora de tomar una decisión de importancia como esta y no tomarlo a la ligera. Existen varios sitios donde vender joyas usadas:
- Casas de empeños: es una buena opción para quien necesita dinero rápido. Son entidades que funcionan facilitando préstamos a cambio de dejar las joyas como fianza. En el caso de impago, sacan las joyas a subasta y si se incrementa la cantidad económica respecto a lo que se le ha prestado, la diferencia la reembolsan al cliente.
- Tiendas de compraventa de oro: este tipo de negocios trabajan exclusivamente con oro. Ellos se encargan de evaluar la cantidad (peso en quilates) y su pureza, sin tener en cuenta el diseño. Cuando lo tasan le informan al vendedor y, si está de acuerdo, pueden realizar la operación en ese mismo instante.
- Empresas intermediarias expertas en el sector: normalmente disponen de un equipo de gemólogos y vendedores que se encargan de realizar todo el proceso, desde la tasación hasta la venta. Lo hacen desde venta online hasta subastas si se trata de joyería de gran valor. Cuando se realiza la venta la empresa gana un porcentaje de la transacción, anteriormente pactado con el vendedor y firmado en un contrato.
- Particulares: la venta a particulares puede resultar muy fácil en un primer momento puesto que no hay intermediarios que obtengan un beneficio económico, pero si se decide optar por este método, se debe saber que cuando la compra se ha realizado, es obligatorio presentar en la delegación de Hacienda, un impuesto que se llama ITP (Impuesto de Transmisiones Patrimoniales) que varía entre un 4% – 10% (dependiendo de la comunidad autónoma) teniendo un periodo de tiempo máximo para presentarlo.
Estas son las diferentes opciones si se necesita vender joyas de segunda mano, desde aquí insistimos en la importancia de trabajar con expertos de confianza y profesionalidad, es la única manera de disminuir el riesgo de ser estafados.