El personal de Sémola ha demostrado un excelente sentido del humor al decorar no sólo los pasteles y las tartas con detalles propios de la mencionada celebración, sino también sus propios uniformes de trabajo, creando un ambiente festivo y alegre. Es evidente que ese buen humor repercute luego en el buen hacer de todas sus variedades de pan, de sus deliciosas galletas, y de los vistosos pasteles con agradables sabores que se van agotando a lo largo de cada día. Está claro que lo que se hace con buena técnica, con buenos productos y con buen humor, resulta mucho mejor.