El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha reivindicado el vino albariño como un símbolo de «serenidad», tal y como reza el ‘apellido’ del Capítulo Serenísimo del Albariño de Cambados, que ha celebrado este domingo su 71ª edición, y donde ha lamentado que el resultado de las elecciones generales haya sido «un cóctel agitado y no «una copa de buen vino».
En su intervención, con la que ha dado comienzo este acto de investidura de Damas y Cabaleiros del Albariño 2023, Feijóo también ha señalado que es una «lástima» que no todas las investiduras «sean como esta».
Así, ha mostrado su «envidia» por un vino que «gana ediciones en mesas y certámenes sin que nadie lo discuta». «Ojalá todas las elecciones fuesen tan claras y el resultado fuese una copa de buen vino y no un cóctel agitado», ha manifestado.
Además, ha puesto en valor que este Capítulo llevase el apellido de ‘serenísimo’ en un tiempo en el que «la serenidad era una virtud indiscutible», por lo que ha instado a «reivindicarla» de nuevo.
En el Capítulo Serenísimo del Albariño de Cambados, que se ha celebrado este domingo en el Pazo de Fefiñáns, el líder de los populares ha hecho referencia al título del libro del psiquiatra Luis Rojas Marcos –uno de los Cabaleiros de esta edición–, ‘Somos lo que hablamos’. Así, ha recordado que hablar «es lo que crea los pueblos, las culturas y las civilizaciones».
En este sentido, en plenas negociaciones para formar Gobierno, Feijóo ha afirmado que «no es posible concebir una democracia en la que sus protagonistas estén mudos y se nieguen a hablar». «Hablando se entiende la gente», ha insistido.
«Hablar y escuchar»
Asimismo, el líder de los populares ha asegurado que su «principal logro» en su etapa como presidente de la Xunta se podría resumir en dos verbos: «Hablar y escuchar».
A continuación, ha reivindicado el albariño como «compañero» que mezcla «el hablar» para darle «un sabor especial». «El bebedor solitario es una anomalía, lo natural y saludable es que el albariño presida una mesa de mujeres y hombres que hablan como si fuese un presidente de un parlamento cordial», ha expuesto.
«Siempre acudo a esta investidura y siempre me despido de ella convencido de que poseemos valores indispensables en el tiempo que nos toca. El albariño nos une. Somos lo que hablamos; para ser, pues, hay que hablar. Lástima que no todas las investiduras sean como esta. Un brindis por Galicia y la España capaces de hablar», ha concluido.
Damas e Cabaleiros
Feijóo, que ha presidido esta edición como ‘gran mestre del capítulo serenísimo del Albariño’, ha estado acompañado por el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, el alcalde de Cambados, Samuel Lago, y el presidente de la Diputación de Pontevedra, Luis López, entre otras autoridades.
Este año las distinguidas como Damas del Albariño han sido la periodista de Castro Caldelas, Lucía Rodríguez Vázquez, y Ana Rodríguez Carril, de la Bodega Bouza de Carril, mientras que los Cabaleiros han sido el conselleiro de Educación e Cultura, Román Rodríguez, el doctor en psiquiatría, Luis Rojas Marcos, y el embajador de Argentina en España, Ricardo Alfonsín, hijo del expresidente argentino Raúl Ricardo Alfonsín, con raíces familiares en Ribadumia.
Al recibir el galardón, todos ellos se han animado a beber de un trago la copa de albariño con la que inician su distinción como Damas y Cabaleiros del Albariño de Cambados.
«Símbolo de la felicidad»
El encargado de cerrar el acto ha sido Luis Rojas Marcos, con un discurso en el que ha destacado el vino como «un producto», pero también como un «símbolo de la felicidad humana y de la satisfacción con la vida».
«El vino albariño nutre esta convicción de que vivir es deseable y merece la pena. Promueve actitudes y conductas gratificantes», ha subrayado el reconocido psiquiatra.
Para concluir, la Banda de Gaitas de Bembrive ha interpretado el Himno Gallego ante un patio de Armas del Pazo de Fefiñáns repleto en este domingo de festividad en la localidad pontevedresa.