O Tranquilo, un restaurante familiar fundado por Manuel Bastos en 1952, lleva más de siete décadas en Cesantes (Redondela) deleitando paladares con su cocina casera y tradicional. Un escondite gastronómico donde el tiempo parece detenerse, invitando a la sobremesa pausada y a la charla distendida. Sin embargo, en la era digital, donde la opinión de un desconocido en la red puede tener más peso que la recomendación del vecino de toda la vida, O Tranquilo se enfrenta a una batalla desigual contra un gigante invisible: TripAdvisor.
Una década en el purgatorio digital
Hace una década, una clienta confundió O Tranquilo con otro establecimiento y escribió una reseña negativa, mencionando incluso platos que ni siquiera figuran en su carta, como «calamares en su tinta». A pesar de que la clienta reconoció su error y quiso rectificar la reseña, TripAdvisor se lo impidió, condenando a O Tranquilo a una especie de purgatorio digital. «Nunca servimos este plato aquí», comenta Tito, el propietario de tercera generación del restaurante. «Nos pusimos en contacto con la chica que escribió la reseña. Luego de conversar con ella y enviarle fotos del local para confirmar que no era el mismo, reconoció su error. Días después, nos llamó para informarnos que TripAdvisor no le permitió modificarla ni eliminarla, por lo que la reseña sigue ahí después de 10 años”, cuenta Tito.
Durante la última década, el restaurante O Tranquilo ha visto cómo su reputación se ha visto empañada por una única reseña negativa en TripAdvisor. Esta crítica, que aparece como la primera opinión al buscar el restaurante en Google, ha tenido un impacto negativo en el negocio, alejando a potenciales clientes y perjudicando su imagen. “Aunque la reseña no se refiere a mi establecimiento y es falsa, podría aceptarla. Sin embargo, me parece inaceptable que aparezca como la primera opinión de mi negocio en Google”.
El comentario en TripAdvisor ha definido a O Tranquilo como un restaurante «No Recomendable», a pesar de que la puntuación media de 4,3 sobre 5 en la propia plataforma, basada en cientos de opiniones positivas. Esta discrepancia entre la calificación general y la reseña negativa ha generado confusión entre los usuarios, muchos de los cuales se guían por las opiniones online a la hora de elegir un restaurante.
TripAdvisor bajo sospecha
TripAdvisor, el Goliat de las opiniones online, ostenta un poder desmedido. Sus tentáculos digitales alcanzan a millones de usuarios, quienes confían a ciegas en las puntuaciones y comentarios que allí se publican. Un sistema que, en ocasiones, se convierte en un arma de doble filo, capaz de encumbrar o derribar un negocio con un simple clic. «Es desesperante ver cómo una sola opinión equivocada puede afectar tanto», dice Tito con frustración, “llevamos 10 años soportando una mentira”.
El modelo de negocio de TripAdvisor, basado en comisiones por reservas, publicidad y patrocinios, ha sido cuestionado por muchos. Algunos críticos argumentan que este sistema crea un conflicto de intereses, priorizando los negocios que pagan más y relegando a un segundo plano a aquellos que no lo hacen.
TripAdvisor se ha convertido en una herramienta indispensable para planificar nuestras aventuras. Sin embargo, en los últimos años, la sombra de las reseñas falsas ha empañado la fiabilidad de este sitio. ¿Qué podemos hacer para combatir este problema y asegurarnos de que las opiniones que leemos sean genuinas?
Responsabilidad compartida entre plataformas y usuarios
En primer lugar, es necesario que TripAdvisor asuma una mayor responsabilidad. Los expertos recomiendan que la plataforma implemente medidas más estrictas para verificar la identidad de los usuarios y colaborar con los negocios para detectar y eliminar las reseñas falsa. Un sistema de verificación más robusto, como la solicitud de comprobantes de reserva o fotos del establecimiento, podría ayudar a disuadir a los estafadores.
Sin embargo, la responsabilidad no recae solo en TripAdvisor. Los usuarios también debemos ser conscientes de que no todas las reseñas que leemos son fiables. Es importante leer las opiniones con ojo crítico, prestando atención a detalles como la coherencia, la ortografía y la gramática, así como a la cantidad de reseñas que ha escrito el usuario.
El caso de O Tranquilo es un ejemplo preocupante de la impunidad que pueden tener las reseñas falsas en plataformas como TripAdvisor. “Debido a nuestro limitado espacio interior, solo funcionamos durante la temporada de verano, cuando podemos aprovechar al máximo nuestra amplia terraza así que el 15 de septiembre cerramos, si te fijas, la reseña está escrita dos semanas después de nuestro cierre”. Es necesario que se tomen medidas para proteger a los negocios y garantizar que los usuarios tengan acceso a información veraz.
En un mundo cada vez más digitalizado, donde la reputación online se ha convertido en un factor crucial para el éxito de un negocio, es necesario que las plataformas como TripAdvisor asuman una mayor responsabilidad en la lucha contra las reseñas falsas. Implementar medidas más efectivas de verificación de identidad y colaboración con los negocios para detectar y eliminar críticas falsas son solo algunas de las acciones que se podrían tomar.
Mientras tanto, O Tranquilo sigue luchando por mantener viva la llama de su tradición gastronómica en mitad de era digital. «Seguiremos adelante, pese a todo», dice Tito con determinación. Este caso nos invita a reflexionar sobre el poder de las opiniones online y la necesidad de defender la verdad en un mundo plagado de falsedades.