Este pastel de pescado es similar al clásico pastel de carne en su preparación, pero su sabor es mucho más suave y al no tener espinas es muy adecuado para que los niños coman pescado sin poner problemas.
Ingredientes para 4 personas:
Para el puré de patata:
800 g de patatas peladas.
leche.
1 huevo.
aceite de oliva.
sal.
pimienta.
Para el relleno:
1 pescadilla {u otro pescado de vuestro gusto} de aproximadamente 1 kg.
50 g de cebolla.
1 diente de ajo.
50 g de zanahoria.
25 g de pimiento verde.
25 g de pimiento rojo.
50 g de calabacín.
25 g de puerro.
75 g de guisantes.
200 ml de caldo de pescado {o agua}
1 cucharadita de maizena.
aceite de oliva.
sal.
pimienta.
Preparación:
Ponemos a cocer las patatas troceadas en agua con sal hasta que estén tiernas. Las pasamos por el pasapurés, las mezclamos con el huevo batido, sal, pimienta, un chorrito de aceite de oliva y leche {hasta que obtengamos la textura que más nos guste, no conviene que esté muy flojo para poder montar el pastel}.
En una sartén, calentamos un poquito aceite de oliva y pochamos todas las verduras picadas bien finas.
Mientras tanto, limpiamos el pescado de piel y espinas. Cortamos la merluza en trocitos más bien pequeños.
Añadimos a las verduras los 200 ml de caldo con la maizena desleída en él. Damos un hervor hasta que el caldo espese. Añadimos el pescado troceado, y repartimos en el fondo de una fuente que pueda ir al horno.
Distribuimos el puré de patata por encima del pescado. Horneamos a 180ºC durante 30 minutos, calor arriba y abajo. Los últimos 10 minutos, además, encendemos el grill para que se dore la superficie.