La cultura del vino en Galicia se enriquece con la diversidad de sus Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP), que ponen en valor la tradición vinícola de esta comunidad. Exploramos el Túnel dos Viños de Indicaciones Geográficas de Galicia en Vigo, un proyecto que destaca estas IGP y sus vinos únicos.
Las Denominaciones de Origen (DO) y las Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP) son herramientas clave de regulación de la Unión Europea que salvaguardan la autenticidad y calidad de productos tradicionales vinculados a territorios específicos. Estos productos, gracias a sus características
únicas, ganan una posición destacada en el mercado. Los productos con IGP deben ser originarios de una región o país determinado, poseer una calidad distintiva, y tener al menos una fase de producción en la zona geográfica definida.
En Galicia, cinco IGP actualmente elaboran vinos siguiendo las regulaciones establecidas por la Xunta de Galicia. Estas normas detallan aspectos como variedades de uva permitidas, rendimiento máximo y áreas geográficas de cultivo y producción. También imponen requisitos para la elaboración y
embotellado en cada Indicación Geográfica Protegida.
Estas Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP), al igual que las cuatro Denominaciones de Orixen, certifican el origen y la calidad de los vinos que producen.
El Túnel dos Viños de las IGP en Vigo, dirigido por el sumiller Martinho Santos de Vide Vide (Santiago de Compostela), se ha propuesto dar a conocer y valorar las desconocidas IGP de Galicia. «Vinos de las IGP de Galicia» es un proyecto de cooperación que involucra a los Grupos de Desarrollo Rural de los
municipios donde se ubican las cuatro IGP que elaboran vinos en Galicia. Su objetivo es impulsar el sector vitivinícola en cada Indicación, estableciendo canales de comunicación y cooperación, y difundiendo los productos y recursos enoturísticos de la región.
Vámonos de viaje
Empecemos nuestro viaje en la IGP Viño da Terra de Betanzos con «Xeixedo,» un vino que destaca por recuperar la variedad de uva Branco Lexitimo, una cepa aromática. En boca, se revela como un vino típico de la costa atlántica, caracterizado por la lenta maduración de la uva que lo dota de una
buena intensidad en nariz con notas herbáceas. En boca presenta un fuerte inicio pero poco a poco pierde esa intensidad dejando paso a una acidez, quizás, excesiva.
Nuestro recorrido nos lleva a Viño da Terra de Barbanza e Iria, donde probamos «Komokabras,» un vino monovarietal de Albariño con un breve paso por barrica. La botella que degustamos estaba recién embotellada, lo que terminó jugando una mala pasada al vino ya que ello se tradujo en una
falta de integración entre la madera y la uva. Habrá que darle tiempo para que esta añada madure.
Ya en las Rías Baixas, nos topamos con la indicación de Ribeiras do Morrazo, donde encontramos «Reboraira«, un vino galardonado con el acio de ouro dentro de las IGP. A diferencia de otros Albariños, este vino presenta un perfil discreto en boca, con matices propios que lo hacen destacar.
Aunque hemos probado un vino blanco, lo más distintivo de la zona podría ser el «Tinto Femia«, un vino tinto elaborado a partir de uvas tintas. Sin duda, una pena no haber podido catar un vino referencia de esta uva.
Continuando nuestro viaje, dejamos la costa y llegamos a la zona de Ourense a través de la IGP Val do Miño. A pesar de que todos los vinos gallegos se desarrollan en un clima oceánico, es esencial considerar los diversos mesoclimas presentes, esto debemos tenerlo muy presente en nuestro siguiente vino a catar.
De la mano de Vides Singulares, encontramos «Amnos Dei,» un vino blanco con reflejos dorados, elaborado a través de maceración con pieles y un paso de 6 meses por barrica. Este vino, alejado de los sabores tradicionales de Galicia, se acerca a los orange wine, una tendencia en auge, siendo notablemente más cálido.
Finalmente, en Terras do Navia, probamos «DPieiga» de Adega Sidrón, el primer vino tinto de nuestro viaje. En este vino sorprende su recuerdo a pizarra, un perfil completamente diferente a los Mencía que estamos acostumbrados a tomar. Es sin duda un vino singular y distinto que cerró de
una manera formidable este Túnel do Viño.
Desde la Edad Media
Estas cinco IGP rescatan y enaltecen los vinos que han acompañado a Galicia a lo largo de su historia, desde la Edad Media, y que, por razones administrativas, quedaron fuera de las Denominaciones de Origen.
El Túnel dos Viños de Indicaciones Geográficas de Galicia en Vigo se erige como un escaparate para estos tesoros vinícolas que merecen un reconocimiento renovado. Un proyecto que celebra la riqueza vinícola de Galicia y se convierte en un tributo a la diversidad de sus vinos.