Isabel García es la cara amable de “Origen Arte Floral”, una joven floristería fundada por una veterana del sector tras varias décadas de trabajo en Vigo y Moaña («Raíz» en Pereiró, «Casaplanta» en Castrelos y tanatorio de Moaña, entre otras). Ahora, desde Cangas (Rúa das Xestas 23) cubre toda la comarca de O Morrazo, Vigo y alrededores. El color y el buen gusto inundan desde hace dos años el local que regenta, en el barrio de A Choupana, un bajo con la puerta siempre abierta para atender a todos los que se asoman a contemplar un vergel.
La situación actual es complicada y el sector se enfrenta a su semana grande, Todos los Santos y Difuntos, con la reciente declaración del estado de alarma. En cualquier caso, los cementerios estarán abiertos para llevar flores a los seres queridos y, si no es posible, desde las floristerías también se ofrecen a llevar los arreglos a los domicilios y camposantos.
Tal y como ocurrió en el Día de la Madre y el del Padre puede pasar que se cierren los cementerios, pero ya existen acuerdos con los diferentes concellos para que las floristas accedan a los recintos y coloquen sus encargos.
“Las flores regresarán a los cementerios, eternidad y sabiduría es el significado del crisantemo, es la época de la temporada y recogida, así que por calidad y precio es la protagonista que llena nuestros cementerios. Devuelven el color y la memoria de los que ya no están con nosotros, son el homenaje a nuestros seres queridos y, si alguien no puede ir, se las llevamos”, señala Isabel. Pero hay excepciones para toda regla y los clientes se inclinan cada vez más hacia las flores exóticas. “Bellas heliconias, maravillosas proteas, diversidad de orquídeas: vandas, phalaenopsis, y por supuesto las elegantes rosas, lisianthus y una gran variedad de verde que son la cabecera de nuestras creaciones, dando intensidad a la belleza de las flores”, añade.
Las floristerías tuvieron que cerrar la pasada primavera durante 50 días y el trabajo se vio bloqueado. Pérdida de producto perecedero, cancelaciones de bodas, talleres, entierros, Día del Padre y la Madre, comuniones y un sinfín de trabajo por hacer que no pudieron asumir.
“El gran problema en el sector es que el producto es perecedero, nos vemos obligados a arriesgar para llenar de color y magia nuestras tiendas, pero nos sentimos afortunados porque tras abrir nuestro negocio nos encontramos con una fluidez de trabajo diario, que llegaba a continuación de lo sucedido”, explica.
Dicen que viene para quedarse y quieren ser cautos y prudentes para gestionar compras y salir airosos sin olvidarse de la salud. “La propuesta es crear y sorprender, mirar atrás y apostar por la vuelta de la elaboración. Las flores transmiten sentimientos y momentos, y eso es lo que queremos evocar, personalizar cada trabajo”, insiste la responsable de “Origen”.
Isabel García apunta que “lo genuino y original es nuestro objetivo, elaborando, al mismo tiempo, minuciosamente cada creación para que todo adquiera su propio sentido” y no se olvida de agradecer el apoyo de familia y amigos en esta situación en la que también se encuentran todos los que trabajan mano a mano para que el sector de la flor siga en marcha: agricultores, almacenistas y sobre todo, el amplio abanico de floristas, que como yo, comparten un único sentimiento, la pasión. “Deseo mucha suerte a todos en estos momentos”, señala.
Hoya carnosa