Agentes de la Policía Nacional han detenido al fugitivo mexicano Emilio Lozoya al que fuera director general de la petrolera Pemex en nombre de la cual negoció la compra del astillero vigués Barreras. Lozoya era buscado en su país de origen por hechos ocurridos en 2012 y 2013 cuando dirigía la compañía Petróleos Mexicanos. Las autoridades mexicanas iniciaron en mayo de 2019 las labores de búsqueda internacional para detener al prófugo.
Según informó este miércoles la Policía Nacional, el detenido se encontraba fugado de México desde que en mayo de 2019 su nombre surgió como presunto responsable de un entramado de corrupción por actividades llevadas a cabo durante los años 2012 y 2013. Entonces ejercía como director general de la petrolera mexicana Pemex. Según la Fiscalía Mexicana se estiman en 280 millones de dólares el total de dinero defraudado.
Alto nivel adquisitivo y fuertes lazos internacionales
Desde ese momento las autoridades mexicanas iniciaron una búsqueda internacional para detener al prófugo. «Gracias a la excelente colaboración existente entre la Fiscalía Mexicana y la Policía Nacional española se obtuvieron indicios que situaban al fugitivo en diferentes localidades españolas», asegura. El alto poder adquisitivo y sus lazos internacionales complicaban su localización.
Las investigaciones llevadas a cabo por la Policía Nacional se prolongaron durante nueve meses, hasta que a principios de 2020 se pudo situar al prófugo en la provincia de Málaga. Este miércoles el Grupo de Localización de Fugitivos Internacionales de la Comisaría General de Policía Judicial y de la Udyco de la Comisaría de Málaga culminó la detención del fugitivo en los alrededores de una urbanización de Málaga.
El detenido, Emilio Lozoya, fue el director general de Pemex encargado de negociar con el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, la alianza en el sector naval que llevó a la compra del astillero vigués Barreras y al encargo de los floteles.