En el texto sostienen que el evento “no se ajusta a la legislación” y avisan del “daño” que causará a gran parte del tejido comercial de toda la comarca “precisamente en las fechas en las que el sector debería tener más actividad”.
Según exponen, la feria, en la que apenas existe participación del comercio vigués, “vulnera varios artículos de la ley de comercio interior, al no estar organizada por establecimientos comerciales con actividad habitual en nuestra ciudad, estando una sola empresa ocupando la mayoría del espacio e incluso porque este tipo de ferias se deben hacer en período de rebajas”, detalla Victor Fernández, presidente de Aetravi, una de las asociaciones que participa en la mencionada plataforma.
En estos momentos, las asociaciones de comerciantes están a la expectativa de una respuesta por parte de las administraciones públicas, de las que esperan “velen por la defensa de la economía local como corresponde a los representantes en las instituciones públicas”. “De no ser así, se estaría causando un daño irreparable e incomprensible”, advierten.
Esta feria ya fue objeto de polémica esta semana por los anuncios que ha desplegado por todo Vigo sin autorización. El alcalde de la ciudad, Abel Caballero, confirmó que la empresa responsable carecía de permiso y aseguró que el Concello iba a tomar medidas y empezaría a multar a aquellas firmas que obraran de esta manera. Sin embargo, estos carteles publicitarios todavía siguen presentes en multitud de zonas del casco urbano e incluso de las parroquias.